Max Verstappen salía 14º en el GP de Bélgica y terminó ganando. Mientras, Charles Leclerc arrancaba desde la 15ª plaza, justo detrás del neerlandés, pero terminó en la 6ª posición. El piloto monegasco quiso aclarar después de la carrera que ese resultado no fue ‘real’, ya que su rendimiento se vio perjudicado por algo que sucedió una vez había iniciado la cita.
Charles remontó hasta la novena posición antes de que entrara el ‘Safety Car’ en la vuelta dos. Estaba justo detrás de Verstappen, que había ganado muchas posiciones, hasta la octava plaza. Pero a partir de ahí, su recuperación de puestos en carrera no fue al ritmo de Max. Según Charles y el equipo Ferrari, todo fue por culpa de un ‘tear-off’ (protector de la visera del casco) que tiró el neerlandés cuando estaba justo delante del monegasco en los primeros compases de la cita. Con tal mala suerte de que ese ‘tear-off’ se quedó enganchado en una zona sensible del coche de Leclerc.
Leclerc aseguró que ese elemento se quedó en el conducto de frenos y eso provocó un sobrecalentamiento de los frenos porque el ‘tear-off’ no permitía entrar el aire hacia el disco de freno. Pero eso no es todo. Según Charles, eso provocó su sanción posterior que le costó una posición ante Alonso porque ese hecho hizo que un sensor se averiase y ello le hizo superar los límites de velocidad del pit lane al final de la cita por un km/h.
“P9 en la Vuelta 1 luego y luego un ‘tear-off’ en los frenos causa el sobrecalentamiento del freno delantero derecho. Tuve que detenerme para quitarlo de los frenos (paró aprovechando el ‘Safety Car’), remonté hasta la quinta posición y recibí una penalización de 5 segundos por ir demasiado rápido en el pit lane debido a un sensor quemado a causa del primer problema. ¡Hermoso día!”, escribió Leclerc en Twitter.
Al parecer, Verstappen se quitó el ‘tear-off’ debido a la suciedad producida por el toque entre Alonso y Hamilton en la primera vuelta.
Se desconoce lo que hubiera podido conseguir Leclerc en el GP de Bélgica en condiciones normales, teniendo en cuenta que montaba un motor nuevo de Ferrari con mayor potencia.
“Espero que el tear off no haya sido el mío”, decía Verstappen al final de la cita. Pero así fue. Max perjudicó a un rival por el título sin quererlo.