Aleix Espargaró es todo corazón tanto fuera de la pista como dentro de ella donde su visceralidad y vehemencia no tiene límites. Y menos cuando se ha convertido en una de las ruedas de referencia en MotoGP gracias a ese tándem perfecto que forma con la Aprilia. No le perdona el ganador en Termas de Río Hondo a las Honda que quieran maquillar su crisis a su rueda y este año tiene una fijación especial con los hermanos Márquez, tanto de gestos en pista como de palabra después ante la prensa y que por ahora no han intentado entrar excesivamente al trapo de sus declaraciones. Pero es que el pasado año volvió a su box muy enfadado después de una maniobra de su propio hermano Pol, una de las personas a las que más quiere, y se le vio gritar en el box que debían sancionar a Pol.
Este viernes en el FP2 el brazo al aire para recriminar que buscara su rueda se lo ha llevado Marc Márquez y luego en su comparecencia ante la prensa ha llegado a calificar de “vergonzosa” su actitud.
“Ya lleva mucho tiempo haciéndolo, siempre en mitad de la pista esperando y no es normal. Hoy lo ha hecho con mi hermano, con Gardner, después con Oliveira y luego conmigo. Ha estado cerca de un minuto parado. No lo entiendo, es una vergüenza. Lo único que se me ocurre es que sea sólo una falta de confianza. ¿Qué hace Márquez esperando a la Aprilia para hacer una vuelta a Jerez? No lo entiendo, le hace falta una Aprilia para hacer una vuelta rápida el viernes. Me ha hecho enfadar bastante”, ha relatado Aleix en castellano.
Y en inglés repitió más o menos lo mismo: “Es increíble, no entiendo porqué lo hace, es que se espera y en mitad del circuito por mí durante un minuto. Increíble, y eso que le he dicho vamos, vamos, vamos. No he hablado con él, pero habría que hablar con Dirección de Carrera. Muchos hablan de Moto3, pero al final es peor en MotoGP. ¿Es normal que un piloto con tantos títulos espere un minuto en el circuito para seguir a la Aprilia? Qué hacen los chicos de Dirección de Carrera. Podía ser automático, vuelta cancelada y punto, peor es ridículo y al final pierdo la concentración, pierdo la línea, pero es Marc Márquez. Pasó en Malasia y también en Sachsenring, ha estado esperando un minuto en medio de la pista”.
En Mandalika, Austin y Portimao fue Alex Márquez el blanco de sus ira por su conducta en pista. “Álex Márquez tiene cero respeto, se paró en el FP4 para esperarme, luego hizo lo mismo con el primer neumático (en la Q1), y luego otra vez con el segundo neumático. Es su tercer o cuatro años con una Honda oficial. Es increíble que esto ocurra”, manifestó tras sufrir una caída en la Q1 que le condenó a no luchar por la pole en Texas. En Mandalika y Portimao fue más por maniobras al límite en carrera.
Marc no aviva el fuego
Como hiciera el domingo su hermano Alex, Marc ha optado por un perfil bajo: “Sobre lo de Aleix, no le quiero dar más bombo. Es algo natural del motociclismo. No sé exactamente por qué, pero se queja por todo. No sé por qué se quejaba esta vez. Iba lento, no quería ni buscar una rueda porque no tenía la velocidad, ni tenía la moto que tocaba, y sabía que no podía mejorar mucho el tiempo. Así que… He visto que movía las manos y ni he querido darle mayor importancia”.
Y preguntado si el de Aprilia tiene una fijación con los Márquez ha contestado que “no, no creo que tenga fijación. No sé, eso se lo tendríais que preguntar a él, pero en el caso de Aleix, cuando yo estaba en esa posición, porque lo he estado, delante del campeonato, yendo rápido, y me buscaban rueda, no me quejaba, me sentía fuerte, como orgulloso de que me busquen la rueda. Es normal que si te encuentras delante del campeonato, te tienes que sentir orgulloso de que busquen tu rueda para hacer una vuelta. Pero si tú sientes confianza en ti mismo, y vas rápido y estas luchando por ser primero en el Mundial, te da igual, y más con un piloto que hoy estaba el 20. Esto en el motociclismo siempre ha pasado y siempre pasará”.