Con el objetivo de perder peso en tiempo récord, son muchas las personas que apuestan por planes de alimentación restrictivos, como la dieta alcalina. Es una de las dietas más populares ya que son muchas las celebrities que han confesado seguirla: Kate Hudson, Victoria Beckham… ¿Quién no quiere tener un cuerpo como el suyo? Pero ojo, porque la dieta alcalina no tiene ningún tipo de base científica. Es más, los nutricionistas señalan que se trata simplemente de una «dieta milagro más».
¿Qué es la dieta alcalina?
La dieta alcalina se basa en que existen ciertos tiempos de alimentos que acidifican la sangre y dan lugar a muchas enfermedades. Sin embargo, no hay ningún estudio científico que demuestre esto. Antonio Gómez, un reputado nutricionista, explica que es el propio organismo el que se encarga de regular el pH de la sangre para mantenerlo en niveles óptimos. Y señala que con este plan de alimentación quizá podrías cambiar el pH de la orina, pero nunca el del cuerpo ni el de la sangre.
¿Pueden los alimentos ser alcalinizantes?
Ante la pregunta de si existen alimentos alcalinizantes, la respuesta es un rotundo no. Los alimentos no tienen la capacidad para acidificar o basificar la sangre. Lo que sí existe son alimentos con los que puedes sentirte mejor. Pero se debe simplemente a que son saludables, como las frutas y las verduras.
Un plan de alimentación saludable y equilibrado, favoreciendo el consumo de frutas y verduras, y restringiendo los alimentos procesados poco saludables puede proteger el cuerpo de ciertas enfermedades. No obstante, los expertos afirman que nada tiene que ver con los supuestos efectos alcalinizantes de ciertos alimentos.
Por lo tanto, la dieta alcalina parte de un planteamiento falso, así que es imposible atribuirle algún tipo de beneficio. No te dejes engañar por las famosas que defienden que gracias a este plan de alimentación han adelgazado.
Y, por último, uno de los bulos más peligrosos en torno a esta dieta es que puede curar el cáncer. Es completamente falso.
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