El ‘show’ de la FIA posterior a la carrera de Arabia Saudí no se volverá a producir. Por lo menos, en relación a la normativa que hizo que el máximo organismo del automovilismo mundial le quitara el podio a Fernando por una penalización, para posteriormente dar marcha atrás tras el derecho de revisión, devolviéndole la tercera posición al asturiano.
Lo que ocurrió en Jeddah
Todo ocurrió porque Fernando Alonso debía cumplir una sanción de 5 segundos en el pit stop que iba a realizar. Así lo hizo. En esos 5 segundos, la normativa dice que nadie puede trabajar en el coche, y según los directos de carrera, había un pacto no escrito que indicaba que el simple hecho de tocar el monoplaza era considerado “trabajar” en él. En esos 5 segundos de sanción, antes del cambio de ruedas, con Alonso parado en su zona de pit, el mecánico del gato trasero no midió bien y tocó levemente el coche. Ocurrió a 30 vueltas del final.
La FIA pudo avisar antes al asturiano y de esa manera, el español estaba seguro que le habría sacado más de 10 segundos a su perseguidor para que esa sanción no afectara su podio. Pero la decisión de penalizarle con 10 segundos una vez acabada la carrera por supuesto infracción de la norma de cumplimiento de sanción en una parada en boxes dejaba momentáneamente sin el podio a Alonso en Jeddah.
Aston Martin actuó rápidamente y mostró 7 videos de otras acciones similares en los últimos años en las que la FIA no actuó y dejó claro que tocar el coche no significa “trabajar” en él. La FIA no pudo ponerse de acuerdo sobre si había o no un pacto previo que considerara que tocar el coche era considerado trabajar en él. Eso hico que la FIA le devolviera el podio a Alonso.
Aclaración: Tocar el coche con una herramienta es ‘trabajar’
Por todo ello, en pleno GP de Australia, la FIA emitió una clarificación de la normativa.
El artículo 54.4 del Reglamento Deportivo establece que “mientras un coche esté parado en el pit lane como consecuencia de haber incurrido en una sanción de acuerdo con los artículos 54.3a) o 54.3b), no se podrá trabajar en él hasta que el coche haya estado parado durante la duración de la pena”.
Así pues, la directiva enviada por el director deportivo de monoplazas de la FIA, Steve Nielsen, señaló que “para mayor claridad y hasta nuevo aviso, en este contexto, el contacto físico del coche o del conductor con la mano, las herramientas o el equipo (incluidos los gatos delantero y trasero) durante cualquier sanción de este tipo se considerará como trabajo”.
“Se permite el uso de ventiladores de refrigeración durante una penalización siempre que dichos ventiladores no toquen físicamente el coche”, agregó la aclaración.
Es decir, si a algún piloto le ocurriera lo que le pasó a Alonso en Jeddah, sería sancionado con 10 segundos.