Ni la FIFA ni las diferentes confederaciones que dirigen el fútbol mundial reconocerían la competición de la Superliga, esa suerte de liga de élite que disputarían los mejores y más poderosos clubes europeos, que son precisamente quienes están detrás del proyecto. Así lo avisa la FIFA en un comunicado que suscriben las seis confederaciones. Y “en vista de la reciente especulación mediática” sobre la creación de esa Superliga. Pero la nota va más allá, pues advierte de que los futbolistas de esos clubes podrían incluso ser excluidos de las convocatorias de sus respectivas selecciones.
Así dice el comunicado: “A todo club o jugador implicado en una competición así, como consecuencia, no se le permitiría participar en ninguna competición organizada por la FIFA ni por su confederación correspondiente. Según los estatutos de la FIFA y las confederaciones, todas las competiciones deben ser organizadas o reconocidas por el organismo competente a su nivel correspondiente; es decir, por la FIFA a nivel mundial y por las confederaciones a nivel continental”.
La hostilidad de la UEFA a una Superliga europea es conocida desde hace mucho tiempo, por la amenaza que supone para su Liga de Campeones, pero la FIFA no se había opuesto de manera tan frontal hasta que se ha pronunciado este jueves.
“Las confederaciones reconocen a la Copa Mundial de Clubes de la FIFA, con su formato actual y nuevo, como la única competición mundial de clubes, mientras que la FIFA reconoce a las competiciones de clubes organizadas por las confederaciones como las únicas competiciones continentales de clubes”, sigue la nota. Y añade: “Los principios universales del mérito deportivo, la solidaridad, los ascensos y descensos, y la subsidiariedad son la base de la pirámide futbolística que garantiza el éxito global del fútbol y, por ende, están consagrados en los estatutos de la FIFA y las confederaciones. El fútbol goza de una larga y exitosa historia gracias a estos principios”.
Este duro y claro mensaje para los clubes europeos que pretenden impulsar la Euroliga, entre los que se cuentan el Real Madrid y el FC Barcelona, llega firmado por el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, y los de las seis confederaciones: Jeque Salman bin Ebrahim Al Khalifa, Presidente de la AFC; Constant Omari, Presidente interino de la CAF; Vittorio Montagliani, Presidente de la Concacaf; Alejandro Domínguez, Presidente de la Conmebol; Lambert Maltock, Presidente de la OFC, además de por Aleksander Ceferin, Presidente de la UEFA.
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