La frustración del Chelsea con Dembélé

Más de un mes tardaron los aficionados del
Atlético de Madrid
en poder ver al último de los fichajes del equipo colchonero, en acción, con la camiseta rojiblanca. Nos referimos obviamente a Moussa
Dembélé, que este pasado fin de semana tuvo sus primeros minutos con el equipo colchonero.

Pasaron 37 días desde su fichaje por el Atlético, cedido por el Olympique de Lyon, con opción de compra. Entre medias, dudas respecto a por qué no tenía minutos antes cuando habría habido oportunidades para ello… y un revés para el futbolista en forma de positivo por Coronavirus que le dejó fuera del equipo cuando parecía que tocaba ese estreno.

El jugador por fin se estrenaba, hace unos días, en la derrota contra el Levante. Simeone explicaba poco después una de las claves de esa demora en participar. “Es un resultado que no es bueno, pero en este momento me quedo con la vuelta de Lemar, con el segundo tiempo de Felipe y de Lodi, con el muy buen partido de Hermoso, la mejora de Joao en ritmo en el segundo tiempo, con la aparición de Dembélé empezando a entender lo que queremos… Me quedo con todo esto”, indicaba.

En los pocos minutos que tuvo ya demostró alguna de sus características, potencia física, poderío aéreo, capacidad para generar segundas jugadas….

El francés tendrá este martes una nueva oportunidad para contar con minutos. Lo hará ante un equipo que en cierto modo es especial para él porque pudo ser su club. Y es que el delantero francés fue gran objetivo del Chelsea hace sólo un año. Tanto que Sky Sports informó que los Blues

habían rechazado una oferta en torno a los 40 millones de euros por

Dembélé
, y ahora, un año después, parece que se irá de Francia, pero no con destino al oeste de Londres, sino hacia la capital de España. Y le tendrán en frente en los octavos de final de la Champions. Obviamente, el equipo de Tuchel ya está a otra cosa, porque acabó firmando a Timo Werner, que incluso parece mejor opción.

El Atlético ha pagado 1,5 millones de euros por su cesión hasta el final del curso y tiene una opción de compra por el jugador de 33,5 millones de euros “a la que se pueden añadir incentivos por 5 millones”. El atacante cuenta con apenas tres meses de competición para convencer en el Atlético.


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