Una de las cosas que el Atlético de Madrid
valoró especialmente a la hora de firmar a Marcos
Paulo era que no iba a ocupar una de las plazas de extracomunitario. De hecho, una de las ‘virtudes’, aparte de las futbolísticas claro, que los muchos equipos que le siguieron valoraron, era que el jugador -una apuesta por su juventud, al fin y al cabo-, no iba a ocupar una plaza de extranjero.
La razón, que además de la nacionalidad brasileña cuenta con la portuguesa. De hecho, el jugador colchonero tuvo que elegir en un momento dado qué camino seguir y optó por Portugal. Y eso que en las inferiores había sido internacional con Brasil en alguna ocasión.
La historia de su elección tiene que ver con que su abuelo materno, Antonio
Costa, era portugués. De ahí que, por ley contase con la posibilidad de obtener la doble nacionalidad, cosa que hizo. “Mi abuelo es portugués y tuve la oportunidad de obtener la doble ciudadanía y ser llamado por la selección. Fui, aprendí un poco de la cultura, les gusté mucho, me gustó allí y me llamaron”, explicó Marcos
Paulo a Globosporte hace unos años.
El atacante llegó a jugar en el Torneo de Toulon, Sub-19, uno de los más prestigiosos del mundo, donde destacó bastante, marcó varios goles y logró el título con ‘As Quinas’.
Antonio
Costa, padre de Paula
Costa, la madre del jugador rojiblanco nació en Vila
Cova, un pequeño pueblo de Vila
Real, y llegó a R
ío de Janeiro cuando era adolescente. Marcos
Paulo nació ya en Brasil, pero cuando le llamó Portugal no tuvo dudas. Su abuelo y su madre, claro, muy orgullosos: “Estoy muy feliz de que esté teniendo esta oportunidad con Portugal, de conocer el estilo de juego, el país. En cuanto a la elección, depende de él. Soy el club de fútbol Marcos
Paulo. La decisión que tome, yo la seguiré“, dijo al citado medio su madre, Paula.
“Estoy muy feliz de que mi nacionalidad pueda beneficiar a Marcos. Verlo con la camiseta de Portugal es muy emocionante. Me alegra ver que puede elegir entre Portugal y Brasil. Estoy animando. ¡La elección es suya y yo apoyaré la elección que haga!”, explicó el abuelo Antonio.
ELECCIÓN NATURAL PERO NO DEFINITIVA
Al final, para el nuevo futbolista del Atlético de Madrid, fue una elección natural si cabe. Porque había sido llamado por las selecciones brasileñas Sub-17 y Sub-18 entre 2016 y 2018, pero dejó de ser habitual así que Portugal, que le había estado siguiendo, aprovechó la oportunidad. Su primer gran prueba, el Torneo Internacional de Oporto, fue definitivo. Marcó con dos goles y él se sintió comodísimo con su nuevo país.
Además, para él fue una oportunidad de comenzar a adaptarse al fútbol europeo, donde tenía claro que acabaría jugando. “No me llamaban aquí, así que quería aprender un poco sobre el fútbol en el extranjero, en Europa, y adaptarme poco a poco. Ha sido realmente bueno. Allí el fútbol es muy intenso. Más intenso que aquí, más fuerza física, más organizado tácticamente. Incluso es un poco difícil adaptarse tan rápido. Pero dedicándote y esforzándote puedes adaptarte”, explicó el jugador.
Eso sí, el futbolista tiene claro que su decisión no es definitiva. Si en el futuro le llamase Brasil, tendría que meditar de nuevo el camino a seguir.
Source link