Estados Unidos anunciaba esta semana un acuerdo histórico en el fútbol. Después de largos años de lucha, la Federación ha aprobado la igualdad salarial por la que la selección masculina y la femenina pasarán a cobrar lo mismo, una medida que espera crear precedente en el resto de países, entre ellos por supuesto España.
Uno de los argumentos que más se escucha a la hora de comparar salarios o primas por objetivos logrados es que ellos generan más que ellas, pero en el caso americano nunca ha sido así, por lo que el agravio comparativo era realmente alarmante. Aquello por lo que han estado peleando desde 2019 Megan Rapinoe, Alex Morgan y Hope Solo, entre otras, es poco menos que un acto de justicia.
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The Wall Street Journal tuvo acceso a los reportes financieros de US Soccer y demostró que entre 2016 y 2018 la Selección Femenina generó 50,8 millones de dólares en concepto de venta de entradas de los partidos por los 49,9 millones de la masculina. De hecho, en 2016, tras ganar el Mundial de Canadá, las mujeres superaron a los hombres en 1,9 millones de dólares.
Según este rotativo, una jugadora recibiría entonces 99.000 dólares si ganaba 20 partidos en un año, pero un futbolista percibiría 100.000 dólares aún si perdía la misma cantidad de encuentros que disputa.
La diferencia entre lo que cobraban ellas y ellos es destacada teniendo en cuenta también el bagaje de títulos de cada selección. Así, la femenina ha ganado la Copa del Mundo en cuatro ocasiones y la medalla de oro en los Juegos Olímpicos en otras cuatro y encabeza además el ranking mundial de la FIFA. En cambio, en categoría masculina la selección apenas ha despuntado en torneos internacionales ni tiene figuras de renombre que le permita llenar estadios. La repercusión siempre ha sido, pues, mucho menor.
Según el nuevo acuerdo, la US Soccer se convertirá en “la primera federación del mundo en equiparar el dinero de los premios de la Copa Mundial de la FIFA” que se otorga a los equipos por participar en los Mundiales.
“Este es un momento verdaderamente histórico. Estos acuerdos han cambiado el juego para siempre aquí en Estados Unidos y tienen el potencial de cambiar el juego en todo el mundo”, dijo en un comunicado este miércoles la presidenta de U.S. Soccer, Cindy Parlow Cone.