Este viernes 22 de octubre, por cuadragésimo primera vez, se han celebrado en Oviedo los Premios Princesa de Asturias. Los galardones han vuelto al teatro Campoamor tras el año de pandemia, cuando se celebraron en el hotel Reconquista, con la familia real al completo. Además de los Reyes de España y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, también la madre de don Felipe, la reina Sofía, ha acudido a la cita, como lleva haciendo a lo largo de estos 41 años.
La ocasión, de honor, requería una vestimenta a juego. La reina Letizia ha cambiado sus tradicionales trajes de Felipe Varela, que vestía desde 2004, y tampoco ha usado un diseño ya visto, como hizo en 2020 con el aplaudido DelPozo azul noche que había lucido en los premios AS de 2017 y que repitió en Oviedo. Esta vez ha apostado por otra marca española, The 2nd Skin Co., y ha llevado un vestido negro a media pierna algo modificado con respecto al original, al no llevar las mangas e incorporar dos grandes lazos en la falda.
Si la heredera, que cumplirá 16 años a finales de octubre, también ha estrenado un diseño dorado, blanco y negro de Bgo & Me, su hermana Sofía, de 14, ha sorprendido con una falda de tul rosa de Psophia y una camiseta negra. Y ahí estaba el guiño a lo reciclado y a su propia madre. Porque ese top negro pertenecía a la reina Letizia.
La esposa de Felipe VI vistió esa prenda, que en este caso sí es de Felipe Varela, en una cena de gala en honor al presidente de Chile, Sebastián Piñera, y su esposa, Cecilia Morel celebrada a principios de marzo de 2011 en el Palacio Real de Madrid. Para la ocasión, la reina la combinó con una falda larga en tafetán negro y con gran vuelo. Entonces llevó también la llamada tiara prusiana, con la que realizó su puesta de largo y después se casó la reina Sofía y que era una de las favoritas de su madre, la reina Federica, al tener formas que recuerdan al Partenón. Desde entonces no ha vuelto a llevar nada de ese conjunto, ni la tiara, ni la falda, ni tampoco la camiseta, ahora recuperada por su hija, 10 años y medio después.
La situación recuerda a una anécdota similar ocurrida hace pocos días. Entonces Zahara, una de las hijas de Angelina Jolie, de 16 años, llevó para un estreno de cine el mismo vestido que su madre había lucido para los premios Oscar de 2014.
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