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La joven con enanismo abandonada por sus padres adoptivos en EE UU: “No intenté matar a nadie”



Natalia Grace Barnett, la joven ucraniana que fue abandonada en 2013 por sus padres adoptivos al sentirse amenazados por su comportamiento, ha roto su silencio esta semana para desmentir la mayoría de las afirmaciones de Kristine y Michael Barnett. La pareja estadounidense está en libertad bajo fianza y se encuentra a la espera de juicio por haberse mudado a Canadá y haberla dejado sola en un apartamento de Lafayette, una ciudad del Estado de Indiana de 55.000 habitantes, cuando supuestamente esta era menor de edad.
Los Barnett adoptaron a la niña cuando tenía seis años, aunque aseguran que entonces se dieron cuenta de que ya contaba con más de 20. Según su relato, la convivencia con Natalia Grace fue una pesadilla por su comportamiento sociópata. En una entrevista al diario Daily Mail, la madre adoptiva explicó en septiembre que la familia vivía en un estado de terror constante. Siempre según su relato, Natalia intentó envenenarla echando lejía a su café, lanzarla contra una valla electrificada, escondía cuchillos, dibujaba enterramientos de toda la familia en el jardín trasero y aparecía en plena noche junto a su cama.

Extracto de la entrevista.

En su primera entrevista, la joven, que sufre un tipo de enanismo, reconoció que antes de vivir con los Barnett había sido acogida por unas 30 familias. En uno de esos intentos de encontrar un hogar, ha explicado la propia joven, que asegura que actualmente tiene 16 años, fue acogida por una pareja con dos hijos. “En una ocasión, uno de los niños y yo estábamos jugando y en ese forcejeo caímos al suelo, caí sobre él, y la madre interpretó que yo estaba intentando romperle el brazo y me devolvieron”, explicó en el programa del Dr. Phil, producido por Oprah Wimpfrey. “Pero yo no intenté matar a nadie”, ha asegurado.
Natalia Grace estuvo durante el espacio televisivo acompañada por los Mans, la pareja con la que vive en Lafayette desde casi hace siete años. Antwon y Cynthia Mans recogieron a la joven cuando llevaba más de un año viviendo sola en un apartamento pagado por los Barnett y cuando se suponía que tenía ocho años, aunque antes de dejarla sola sus padres adoptivos cambiaron su partida de nacimiento de 2003 a 1989, convirtiéndola automáticamente en mayor de edad.
La familia Mans, que tiene cuatro hijos más, define a Natalia como una joven encantadora, hacia la que nunca han sentido ningún temor. “Ella [por Kristine  Barnett] intenta hacerla parecer un monstruo”, clamó Cynthia Mans, que mantuvo la mano de Natalia Grace entre las suyas durante gran parte de la entrevista. La joven, emocionada, aseguró: “Con los Barnett pensé que había encontrado a la familia perfecta para mí”.

Sus padres adoptivos se enfrentan a cinco años de cárcel, no está muy claro aún si por abandono de una menor o de una persona discapacitada. La pareja, hoy en día divorciada, adoptó a la niña, de origen ucraniano, en 2010 en un orfanato de Florida. En una entrevista al Daily Mail, Kristine Barnett, que antes del caso era conocida como experta en crianza y había logrado que su hijo con autismo llegara a prestigiosos centros de enseñanza, explicó que pronto se dieron cuenta de que la niña era adulta. Según la mujer, aunque supuestamente solo tenía seis años, ya le había brotado el vello púbico, menstruaba y utilizaba un vocabulario propio de una persona mayor.
En 2013, los Barnett se trasladaron a Canadá para que su hijo autista, que con 17 años ya era doctor en Física Cuántica, prosiguiera con sus estudios. Pero dejaron atrás a Natalia Grace, que según sus padres adoptivos tenía en ese momento más de 20 años. Le pagaron un año de alquiler en Lafayette, un seguro médico, cupones de comida y la apuntaron a una escuela de adultos. Un año después, la joven fue desahuciada y el sheriff del condado y el juzgado comenzaron a investigar el caso.
En la partida de nacimiento de Natalia Grace figura que nació el 4 de septiembre de 2003, según han reconocido los Barnett. La policía de Indiana, citada por varios medios estadounidenses, asegura que una prueba de densidad ósea que se le realizó a Natalia en 2010 mostraba que tenía entonces ocho años. Otro test realizado dos años después arrojó que la niña tenía en ese momento 11 años. Pero en 2012 los Barnett consiguieron que un juez cambiara la fecha de nacimiento de la joven a 1989. Con ese cambio, hoy sería una mujer de 30 años. Cómo lograron modificar la fecha de nacimiento es una de las grandes incógnitas en este caso.
En una carta del doctor Andrew McLaren fechada el 24 de octubre de 2016 y con membrete de la clínica de la Universidad de Indiana, publicada por Wish TV —el centro sanitario no ha confirmado la veracidad del documento—, el médico afirma que la fecha que aparece en la partida de nacimiento de Natalia Grace es “claramente incorrecta”. “Lamentablemente determinar la verdad sobre la edad ha sido difícil. Los registros proporcionados por las autoridades de su país de origen, Ucrania, son sumamente incompletos. También porque tiene displasia espondilometafisaria, un tipo de enanismo, los métodos convencionales para calcular la edad no sirven”.

Michael y Kristine Barnett. Cárcel de Tippecanoe

A continuación, explica que un odontólogo certificó en 2011 que su dentadura era la de un adulto y que una evaluación neuropsicológica determinó que se había desarrollado sexualmente. En la misiva, el doctor cuenta que fue hospitalizada en un centro psiquiátrico en 2012 —supuestamente tras atacar a su madre adoptiva—, donde se determinó que tenía, al menos, 14 años y donde fue diagnosticada con un “trastorno de personalidad sociópata” que normalmente no aparece hasta los 16 años. Durante su internamiento, continúa el médico, “ella comenzó a admitir que tenía más de 18 años”. Su edad real aún es un misterio. 


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