La temporada en Italia está a punto de echar el cierre y, antes de que se decida el campeón de la Serie A, Juventus e Inter de Milán disputarán este miércoles la final de la Coppa.
El trofeo, más secundario en un inicio para dos de los clubs más históricos de Europa, se puede convertir en un salvador de este curso. Especialmente para la Juventus de Turín, que esta de vacío y no tiene ninguna opción más que esta Coppa para dar una alegría a su afición. En una temporada de muchos cambios, el cuadro de Massimiliano Allegri ha tardado en carburar pero al menos termina el curso en un mejorado estado de forma.
Tras perder a finales de 2021 la final de la Supercoppa ante el Inter precisamente, el técnico deberá llevar la lección aprendida. No solo eso, a diferencia de esa ocasión, el equipo llega reforzado con Dusan Vlahovic y Paulo Dybala, que llegó tocado pero ahora será titular. Más allá de la conocida y dolorosa baja de Federico Chiesa por lesión, y las de Locatelli y McKennie, solo De Sciglio se pierde la final por sanción.
En el caso del Inter, la lucha por la Serie A contra el Milan debe desaparecer de su cabeza y no obviar la necesidad de levantar también esta Coppa. Es por esto que no hay duda alguna en Simone Inzaghi, que saldrá con lo mejor que tiene a su disposición, es decir, el once de gala. Lautaro Martínez, que ya marcó en la Supercoppa, y Barella como la gran amenaza para la ‘vecchia signora’ en un duelo de colosos en Italia.