Imanol
Alguacil no ha tardado demasiado en corroborar que la profundidad de la plantilla será decisiva en esta peculiar temporada en la que la Real, además de haber tenido un periodo de preparación corto, tendrá que conjugar sus habituales obligaciones con la Supercopa de España y la Europa League. Sólo han transcurrido cinco fechas del calendario liguero y el entrenador de la Real ya ha puesto en liza a 20 de sus 26 futbolistas del primer equipo, además de la testimonial presencia de González
de
Zarate contra el Madrid y de los 90 minutos de Llorente en Valladolid, antes de fichar por el Leeds. Todos los jugadores sanos de la nómina que tiene a sus órdenes el técnico de Orio han gozado de minutos y los únicos que aún permanecen en el anonimato son el portero suplente, Moyá, y los cinco que han arrancado el curso con problemas físicos: Merquelanz, Illarramendi, Zaldua, Guridi y Sangalli.
Es pronto para saber si detrás de esta democratización de los minutos reposa una tendencia sostenible o sólo ha sido una coyuntura pasajera. Viendo el calendario que se le avecina a la Real, en cualquier caso, parece más fácil apostar por que Imanol continuará explorando en la profundidad de su armario que ciñéndose a un libreto más reducido. A partir del domingo en Sevilla, el conjunto txuri urdin afrontará otra serie de siete partidos en 22 días, uno cada tres o cuatro días (jueves y domingo), lo que necesariamente debería de obligar al técnico a ir repartiendo esfuerzos. Para ello contará con una pieza más ya que Guridi está en condiciones de jugar y Zaldua y Zubeldia tampoco pueden estar lejos de reaparecer.
Una tendencia extendida
El método de la Real, en cualquier caso, está bastante extendido en todos los equipos del campeonato. La mayoría de clubs han tenido un periodo de preparación corto, algunos incluso han tenido que esperar hasta los últimos días de mercado para configurar definitivamente sus plantillas y eso ha derivado en que más de la mitad de los conjuntos de Primera
División hayan empleado, como la Real, más de 20 futbolistas en los cinco primeros partidos, sin tener en cuenta los jugadores del filial a los que hayan podido recurrir.
Entre los que menos recursos han utilizado, la casuística es diferente. En el Barcelona, Koeman ha querido dar unos primeros pasos firmes con un ‘once’ tipo tras el convulso verano, Simeone y Bordalás son poco amigos de cambiar su ‘once’ tipo y el Elche arrancó la Liga con apenas 16 profesionales. En líneas generales, la tendencia en estos primeros partidos ha sido dosificar a los jugadores y, así, en torno a 75 futbolistas aún no habrían debutado, menos de cuatro de media por equipo. Y muchos de ellos son porteros suplentes.
Sólo tres plenos en la Real
Otro dato que corrobora que estamos ante un arranque de campaña en el que los entrenadores están especialmente atentos al reparto de cargas es que sólo tres jugadores de la Real han jugado íntegramente los 450 minutos disputados hasta ahora: Remiro, Elustondo y Merino. En toda la Liga sólo 15 jugadores de campo más (17 en total) han completado los cinco partidos. Un dato muy poco habitual en los albores de un campeonato y que ratifica que los entrenadores tienen claro que este año la Liga, más que nunca, es cosa de todos.
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