La Superliga griega, la máxima competición doméstica del fútbol heleno, anunció este miércoles que volverá a los terrenos de juego el fin de semana del 6 y 7 de junio, tras llegar a un acuerdo con el Gobierno griego para implementar las medidas de seguridad necesarias en los partidos que quedan por jugar.
Mañana los clubes volverán a reunirse para determinar qué protocolos se pondrán en marcha y si el calendario de juego -que entraba en su fase de play-offs justo tras la llegada del coronavirus al país- se mantendrá o si, por el contrario, se elaborará uno nuevo teniendo en cuenta los desplazamientos que tendrán que hacer los equipos.
Con esta decisión, el fútbol griego se asegura nombrar un campeón, además de determinar los cuatro puestos restantes de clasificación europea: uno en la previa de la Liga de Campeones y tres en la de la Liga Europa.
La Superliga confirmó también que se jugarán con el mismo formato tanto el play-off de ascenso como en el de descenso, que involucra a los equipos clasificados entre el séptimo y el decimocuarto para dilucidar qué dos equipos bajarán a la Superliga 2.
Grecia, que afronta ya su cuarta semana de desescalada del confinamiento con un balance de casi 2.900 contagiados y 173 fallecidos, ha sido uno de los países europeos menos afectados por el coronavirus hasta el momento.
En los últimos días los clubes también negociaron varias enmiendas al reglamento de competición con la Federación Griega de Fútbol (EPO) para ratificar la prolongación de las fechas del campeonato de liga y reducir los costes de arbitraje pendientes para esta temporada, además de aumentar de 7 a 9 el número de jugadores de banquillo que pueden estar presentes en los partidos.
Estos cambios se someterán a votación este viernes, en la sede de la Federación.
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