Desde las once de la mañana volverán a sentarse la Liga Profesional Femenina y la RFEF en la Ciudad del Fútbol. Retoman la reunión iniciada ayer en la sede del CSD y donde estuvieron las tres delegaciones. Sólo se ausentó el presidente de la RFEF, Luis Rubiales. Fue Andreu Camps quien lideró la delegación federativa donde también acudió Yolanda Parga, responsable del arbitraje femenino del Comité Técnico de Árbitros. Los mismos está previsto que esta mañana lideren la representación federativa en la Ciudad del Fútbol.
Beatriz Álvarez, presidenta de la LPFF, encabezó la delegación de la patronal femenina, dejando constancia de la importancia del tema a tratar.
Importancia que quedó patente también en la representación del CSD que estuvo encabezado por el Secretario de Estado y Presidente del CSD, José Manuel Franco junto al director general, Albert Soler.
Hoy martes el escenario es distinto. Inicialmente sobre la mesa estarán ya sólo los dos actores principales y que llevan más de dos meses negociando. Sobre la mesa la propuesta presentada ayer por la LPFF de 25.000 para las colegiadas, al margen de los gastos de viaje, dietas etc.. y que podría ir creciendo de manera progresiva.
Propuesta que inicialmente está lejos de la posición de las arbitras que quieren llegar a un escenario próximo a los 50.000 euros anuales.
El CSD ya ha dejado patente su posición al respecto y ahora son las dos partes quienes deben llegar a un acuerdo. La puesta en marcha de la liga el próximo fin de semana y después de la imposibilidad de disputarse la primera tras la incomparecencia de las arbitras en los encuentros.