Los errores aribtrales están más de moda que nunca. Desgraciadamente, son ya muchos los partidos que esta temporada se han decidido por una decisión arbitral, por lo que Adam Silver ha salido al paso para intentar mejorar la imagen de la NBA.
A pesar de no haber entrado en detalles, el mandamás de la competición ha asegurado que los árbitros no salen impunes si cometen algún error. “Ellos deben rendir cuentas por sus decisiones. No hacemos públicos los castigos que reciben, no creemos que eso sea apropiado, pero los partidos que se les asignan van ligados a la calidad de sus decisiones. Si avanzan o no hasta los playoffs se ve afectado por la precisión de sus arbitrajes y su comportamiento en la cancha. Hay un sistema para supervisar y hacer esos juicios sobre los árbitros”
LeBron James fue el protagonista del que probablemente sea el error arbitral más grosero de lo que llevamos de temporada. La estrella de los Lakers recibió una clara falta en los últimos segundos del tiempo reglamentario ante los Celtics. Los árbitros no pitaron nada y eso terminó costando el partido a los de Los Angeles, que cayeron en la prórroga.
“Sé que mucha gente estuvo enfadada con la última acción de ese partido. Pero hay que recordar que en nuestra liga no se puede revisar algo que no se ha pitado, ya que se abren muchas dificultades cuando se trata de acciones no pitadas. Además, el otro equipo podría decir que quince segundos antes también se dejaron de pitar algo. Es un tema nada fácil, pero lo vamos a mirar porque la prioridad es que se tome la decisión correcta”.