El coronavirus ha parado por completo el mundo. Aunque la rueda vuelve a girar, también en el fútbol hay ciertos sectores que tardarán en volver a la normalidad. En la Real, por ejemplo, la obra maestra de Anoeta seguirá en ‘stand by’ hasta al menos el verano de 2021, según ha podido saber este periódico. El club no dispone del tiempo material necesario para completar los últimos detalles para que Anoeta quede completamente remodelado.
Son tres los aspectos que quedan por abordar, si bien todavía quedan otro tipo de mejoras añadidas de menor importancia como la iluminación en el EFTE o la pantalla gigante exterior en la tribuna principal, que también están en el aire. Lo único que queda por renovar del feudo de Amara son sus entrañas. El club iba a ponerse manos a la obra este verano para cambiar por completo los vestuarios, las zonas que conectan dichas salas con el césped y la zona de prensa, tanto los pupitres y cabinas como la zona mixta del estadio. El proyecto y la obra ya estaban adjudicados, pero a día de hoy está completamente parado.
El problema principal es única y exclusivamente la falta de tiempo. El retorno de LaLiga el próximo domingo a Anoeta imposibilita poder meter de nuevo las excavadoras en el estadio. La obra requiere de un tiempo que ni ahora con partidos cada 72 horas, ni en julio cuando acaba la temporada disponen. Con sólo el mes de agosto que es cuando no habrá competición tampoco basta. El inicio de la próxima campaña ya tiene fecha, el 12 de septiembre, y no hay espacio temporal para que dichas zonas queden totalmente remodeladas. Tampoco en la Navidad de 2020. La hipotética clasificación europea tampoco ayuda en el próximo curso puesto que el calendario estaría aún más apretado. Así las cosas, las máquinas no volverán a entrar a Anoeta hasta el verano de 2021.
A la espera del ayuntamiento
Si alguien se da un paseo por los alrededores de Anoeta se dará cuenta de que también quedan por acondicionar los accesos para que el estadio esté completamente terminado. Es otra de las cosas que se quedarán en el tintero hasta el próximo periodo estival.
El proyecto de dicha obra, como urbanizar la zona cercana a la estación del Topo, es competencia del ayuntamiento que, a día de hoy y como no podía ser de otra manera, está pendiente de otras necesidades como superar la pandemia. Los próximos presupuestos del consistorio están también sin negociar y no queda más remedio que esperar.
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