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La peligrosa dieta que un jugador del Celta llevaba a cabo a escondidas



El control de la comida es un aspecto fundamental en el deporte profesional. Primero, para mantenerte en un estado de forma óptimo para llevar a cabo tu actividad. Segundo, para poder regular tu peso/masa muscular. Y por último, para prevenir el riesgo de lesiones. El caso más conocida es el de Leo Messi, que tras cambiar sus hábitos alimenticios pasó de lesionarse con regularidad en los inicios de su carrera a ser prácticamente inmune a los desgarros musculares.






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Normalmente, en el fútbol de élite se tiene un control estricto sobre la dieta de los jugadores. Por eso llama poderosamente la atención el caso de Pione Sisto. El jugador del Celta ha reconocido mediante redes sociales que llevaba 21 días alimentándose únicamente a base de fruta. Algo que ha sorprendido tanto a su entrenador como a sus compañeros.






El futbolista empezó con esta dieta para aliviar el dolor que sentía en ciertas zonas del cuerpo y lo consiguió a base de fruta fresca, zumos y agua de coco. Alimentos que van genial para la hidratación, pero hacer un uso excesivo de ellos es tremendamente perjudicial. Y más, para un deportista de élite. El mismo jugador explicó las sensaciones que tenía pasados unos días.




Llegué a perder el control y creía que me iba a volver loco al profundizar tanto en mi interior. Se acentúan el olfato, el tacto, el gusto. Perdí el control sobre todas las emociones y pensamientos y empecé a volverme un poco loco, sinceramente

Pione Sisto



Como apuntan algunos nutricionistas, la fruta y los vegetales son ricos en fibra y carbohidratos. No obstante, carecen de la grasa necesaria para tener una función mental saludable y la falta de fibra podría provocar una reducción de la masa muscular y de energía considerable.






El entrenador del Celta, Fran Escribá, reconocía que Sisto había perdido la alegría en el juego en los últimos días. De hecho, en los últimos partidos apenas ha contado con él. Ahora el danés ya ha vuelto una alimentación normal y quizás el equipo deba plantearse hacer más comidas juntos para que no se repitan casos como este.





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