Zion Williamson sigue dando de qué hablar con su lío de faldas. Esta semana, en el mismo día que anunció en un vídeo de YouTube que iba a ser padre, la actriz porno Moriah Mills aseguró en Twitter que había estado días atrás con el jugador, compartiendo capturas de pantalla y culpándolo del acoso que estaba recibiendo.
La estrella de los New Orleans Pelicans todavía no se ha pronunciado al respecto pero sí lo hizo su padrastro, Anderson Lee, en un evento escolar solidario.
“Es mi hijo y le amo. Cuando yo era un niño, caminaba como un niño. Yo hablaba como un niño, hacía cosas infantiles. Pero cuando me hice un hombre, lo que entendí es que Dios me bendijo. Así que todo lo que voy a decir esta mañana es que te creas la mitad de lo que ves y nada de los que escuchas. Es todo lo que voy a decir. Apoyo a mi hijo al 100%”, dijo Lee.
Los escándalos es lo último que le faltaba ya a Williamson, en el punto de mira después de una nueva temporada con serios problemas con las lesiones.
Después de una temporada entera en blanco, el número 1 del draft de 2019, calló muchas bocas con actuaciones extraordinarias –26 puntos, 7 rebotes y 4,6 asistencias en 33 minutos-, pero el ala-pívot de 22 años se lesionó en enero para no volver a jugar más y quedarse en 29 partidos disputados. Con el añadido de nuevas acusaciones de sobrepeso.