La película de todos los veranos. La formación de los cuatro grupos de Segunda B. Este año toca ir al sprint debido a que la temporada acabó un poco más tarde de lo habitual. Los clubes y las federaciones territoriales trabajan a la carrera. Los ocho representantes del fútbol vasco (Barakaldo, Leioa, Amorebieta, Arenas, Bilbao Athletic, Real Unión, Real Sociedad B y Alavés B) se reunieron en la tarde de ayer para llegar a un punto en común y formalizar la propuesta que defenderán ante la Comisión de Segunda B el próximo día 10 de julio. De ahí saldrá algo definitivo que será ratificado posteriormente por la Federación Española. Algo que acostumbra a ser un mero trámite.
La Vasca aboga por la continuidad con respecto al pasado curso. Su intención es que los ocho conjuntos euskaldunes queden encuadrados con La Rioja (UD Logroñés, Calahorra y Haro), con Navarra (Izarra, Tudelano y Osasuna B), con Asturias (Langreo, Marino, Oviedo B y Sporting B) y con Aragón (Ebro y Ejea).
El grupo quedaría integrado por Barakaldo, Leioa, Amorebieta, Arenas, Bilbao Athletic, Real Unión, Real Sociedad B, Alavés B, UD Logroñés, Calahorra, Haro, Izarra, Tudelano, Osasuna B, Langreo, Marino, Oviedo B, Sporting B, Ebro y Ejea
Un grupo muy norteño y en el que el cuentakilómetros de los equipos vascos no correría en exceso. La novedad con la pasada campaña sería la salida de los cántabros, no habrá ningún club de la comunidad vecina en Segunda B en el presente ejercicio, y la entrada de la dupla aragonesa.
De fructificar, habría un total de seis filiales en competición. Los de Athletic, Real Sociedad y Alavés por parte vasca y los del Oviedo, Sporting y Osasuna. Después de los ascensos de Racing y Mirandés en el reciente playoff, la UD Logroñés apuntaría como uno de los principales candidatos a ocupar los puestos de honor. Los riojanos cayeron en la segunda ronda de la fase de ascenso.
Pero la propuesta definitiva tendrá que llegar mediante un consenso generalizado el día 10. Acostumbra a ser un juego de poder. La alternativa que tenga más votos y que convenza a más clubes será la que salga adelante. Y en los trasfondos de las diversas federaciones territoriales del panorama nacional se cocina otra opción distinta a la vasca, aunque con ciertas semejanzas, y que está ganando mucho peso.
Su idea, en lo que atañe a las escuadras euskaldunes, es que vayan a un grupo con La Rioja, con Navarra y con Castilla y León (Unionistas, Cultural Leonesa, Guijuelo, Burgos, Salamanca CF y Valladolid B). Es decir, no entrarían los asturianos ni los aragoneses y tendrían cabida los clubes castellano-leoneses.
Una propuesta con un toque peculiar de cara al grupo I, en el que competirían como suele ser habitual los gallegos, los asturianos, los madrileños, el canario; y la novedad llegaría con los equipos de Baleares y el Melilla.
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