Hay un submarino que navega por las aguas de la máxima categoría con la puntería perfectamente calibrada. Donde pone el ojo, pone el torpedo. No se le resiste ningún objetivo. Tocado y hundido. Goles a discreción en el Estadio de la Cerámica. El Villarreal ha logrado 17 tantos en sus cinco compromisos ligueros como local. A una media de 3,4 muescas por partido. Una diana por cada 26 minutos de juego. Solo el Barça supera al conjunto amarillo. Los culés han firmado 21 goles en cinco choques.
El ritmo goleador que impone el Villarreal en su feudo es difícil de resistir. Javi Calleja cuenta con un temible arsenal a su disposición. Para el Athletic supondrá la prueba del algodón. Una de las mejores defensas del campeonato frente a uno de los ataques más poderosos. Confrontación de estilos sobre el tapete. Aunque en la clasificación ambas escuadras caminan prácticamente de la mano. Los castellonenses son séptimos, con un punto más que los rojiblancos, que ocupan la octava plaza.
Las cartas quedaron a la vista sobre la mesa desde la jornada inaugural. El Villarreal no engaña a nadie. Primer partido y 4-4 ante el Granada. El siguiente en desfilar por La Cerámica fue el Real Madrid y hubo tablas (2-2). Un intercambio de golpes que no beneficiaba completamente al submarino. Se le resistía el primer triunfo ante su público. Hasta que ajustó las tuercas y cogió velocidad de crucero. Los dirigidos por Calleja encadenan tres victorias en casa. La racha comenzó ante el Valladolid (2-0) y tuvo continuidad en los envites contra el Betis (5-1) y el Alavés (4-1). El Athletic intentará aguar mañana la fiesta amarilla y cortar su dinámica ganadora.
Gerard Moreno y Toko Ekambi son las principales amenazas ofensivas para los leones. Suman cuatro goles por cabeza en La Cerámica. Pero repartidos de distinta forma. El catalán, pichichi de la categoría con un total de ocho tantos, ha visto puerta en cuatro de los cinco duelos del Villarreal como local. Solo se quedó ‘seco’ frente al Valladolid. El camerunés, por su parte, se mueve a pares. Viene de cosechar sendos dobletes ante Alavés y Betis. La estadística realizadora de la escuadra mediterránea la completan Cazorla (3), Moi Gómez (2), Chukwueze (2) y Ontiveros (2).
El Villarreal se mueve a una media de 3,4 goles por partido como local y Gerard Moreno y Toko Ekambi son los máximos anotadores con cuatro dianas por cabeza
El contrapunto al que se agarra el Athletic es que el Villarreal solo ha sido capaz de echar el candado a su portería en una ocasión. Lo cierto es que con el ritmo goleador que ha llevado tampoco ha necesitado más. Los de Garitano deberán tener especial cuidado con lo que acontezca en el último cuarto del partido. Son los momentos en los que se desata la tormenta en La Cerámica.
Al Villarreal se le atragantó en sus dos comparecencias iniciales en su terreno de juego. Ganaba 4-2 al Granada a falta de quince minutos y hubo reparto de puntos y Bale rescató un empate para el Real Madrid en el 86’. Una coyuntura que los castellonenses han girado a su favor. Frente al Valladolid abrieron el electrónico en el 78’. Los encuentros ante el Betis y el Alavés acabaron en goleadas, pero marchaban en tablas mediado el segundo tiempo. Los arreones del Villarreal son peligrosos.
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