Darwin Núñez protagonizó uno de los traspasos más caros del pasado verano. El delantero uruguayo fichó por el Liverpool por un precio de 75 millones de euros más 25 en variables, según informó el Benfica, una operación que enfureció a Edgardo ‘Chino’ Lasalvia, ex representante del charrúa.
El agente explicó en una entrevista en Fuera de Juego, que se emite por Carve Deportiva, cómo se produjo la separación con Darwin y las malas formas del futbolista a la hora de romper con él justo antes de mudarse a Liverpool.
“No tuve oportunidad de hablar con Darwin. Me enteré cuando vino con seis guardaespaldas y no quiso hablar en el aeropuerto, donde estaba Juanjo Acevedo. Había enviado a un chico de la empresa a buscarlo. Allí traté de llamarlo y desde un mensaje de WhatsApp me dijo que me quería mucho, que siempre sería mi amigo, bla, bla, bla, pero que iba a empezar un nuevo camino con otra empresa, y me bloqueó. No tenía derecho a replicar. Cada uno elige cómo quiere vivir la vida, pero hay karma y todo vuelve“, comenta picado Lasalvia, quien además recomienda a Darwin que se comporte como una buena persona.
“Hay que manejarse como buena persona y hay que tener memoria. Es imposible que no tengas memoria. Si no tienes memoria, o tus padres te enseñaron mal o no te llegó antena. Si me dice ‘vamos con Jorge Mendes’ (su actual agente), le digo, ‘vamos con Jorge Mendes y nos sacamos una foto juntos, si es el uno’. Pero él no se fue con Jorge Mendes, se fue con otro agente, lo mismo que (Nicolás) Otamendi. Cuando estaba en el Benfica le hicieron un trabajito de hormiga, le empezaron a comer la cabeza. Me enfadé cuando perdí a Darwin. Me partió por la mitad porque adoro al niño, pero entendí que es un negocio. Yo no podía ir 10 veces al año a Portugal. A veces no ir te hace distanciarte o no ver cosas que están pasando y después te explota la bomba en la cara”, añade Lasalvia.
“Es una pelea, le ofrecen a mis jugadores el último Iphone, un coche, 20 lucas (dinero). A todos mis jugadores de selección y de Primera de Peñarol. En séptima no los fue a buscar nadie, cuando estaban lesionados no les fue a buscar nadie… Es una prostitución el mundo del fútbol. Me calenté cuando perdí a Darwin“, explicó el exrepresentante del delantero del Liverpool.