Aitor López Rekarte (Arrasate, 44 años) ha vivido multitud de derbis desde la banda derecha y ahora lo hace con mirada de entrenador. Espera un choque de estilos; el orden del Athletic contra la fantasía de la Real. “Estoy deseando que llegue”, afirma.
¿Qué tipo de derbi pronostica?
Es difícil. Viendo el estado de los dos equipos, creo que a nivel defensivo al Athletic es difícil hacerle daño pero la Real tiene mucha dinamita. No me gusta anticipar cosas. Va a ser un partido muy interesante, muy táctico desde el punto de vista defensivo del Athletic y muy dinámico a la hora de aprovechar las contras por parte de la Real.
¿Cree que el Athletic presionará arriba o esperará agazapado?
Creo que, sobre todo en los inicios de cada parte, va a intentar achuchar, pero luego va a tratar de adaptarse al daño que le pueda hacer la Real con su juego combinativo. Puede ser una de las claves. No creo que el Athletic se meta atrás.
La Real, probablemente, tratará de ser protagonista.
Tiene mucha pólvora arriba y capacidad para hacer daño en tres pases. El Athletic lo tendrá bien estudiado e intentará contrarrestarlo con vigilancias, pero a la mínima que se duerma puede sufrir.
¿Qué es lo que más le ha llamado la atención de la Real en este inicio de temporada?
Su potencial ofensivo es muy grande. Me gustaría ir viendo poco a poco cómo el equipo va asentándose a nivel defensivo. Es probablemente una de las asignaturas pendientes del año pasado y en la que seguro que Imanol lleva tiempo trabajando. El Athletic muchas veces es imprevisible. Puede estar atrás pero Muniain y Wiliams arriba son gente rápida y luego tiene la baza, la eterna baza, de Aduriz, que siempre te mete incertidumbre. A ver cómo se consolida la Real a nivel defensivo, porque para hacer daño es importante coger confianza y para eso, es clave que no te hagan goles.
En Mallorca, Portu e Isak fueron protagonistas. ¿El fondo de armario puede marcar diferencias?
Sin duda. Para mí con la plantilla que hay el mayor problema puede ser gestionar a quién pones. Por ejemplo, Willian está acostumbrado a jugar, y hay que ver cómo reacciona si le quitas en un momento dado. Ahí la gestión del entrenador es clave para que todos se sientan importantes y aporten al equipo. Tanto Isak como Portu, cuando han salido, han aportado sorpresa, otra chispa. Tenemos que estar muy felices por tener estos jugadores. Va a ser un partido muy interesante, estoy deseando que llegue.
¿Hemos disparado la euforia con Odegaard?
No me gustan las euforias. Me parece un jugador muy bueno. De alguna manera al decantarse por la Real ya habla de cómo es, porque seguro que ha tenido opciones más cuantiosas. Le conozco de lo poco que he podido estar con él y el chaval ha pasado ya cosas durante su carrera. A los profesionales hay que dejarles trabajar tranquilos. Pasar de 0 a 100 no me gusta, por experiencias que he vivido. Es un muy buen futbolista que tiene que ir asentándose en la Real y darle grandes cosas al equipo.
Jugó con los dos técnicos, tanto con Imanol como con Garitano. ¿Ya se les veía madera de entrenadores?
Con ‘Ima’ coincidí un par de años. Hemos estado mucho tiempo sin tener prácticamente contacto. Le he seguido un poco, pero más desde la distancia. Con Gaizka sí he tenido una relación más cercana y he estado algo más de tiempo con él. Hay que resaltar, sin duda, que los cinco entrenadores de los equipos vascos sean vascos. Es significativo del nivel que hay en este territorio. Los entrenadores cada día lo tienen más complicado, yo lo estoy viviendo. Acabo de sacarme el título UEFA Pro y estoy sin equipo. Si escuchas un poco a este tipo de entrenadores, te das cuenta de que han tenido que pasar por muchas circunstancias, esperando, aguantando. Para mí son unos cracks. La labor que hacen y cómo obtienen el máximo de sus jugadores es una pasada. Hay que valorarlo.
¿Se anima con un resultado?
No no, que luego me lo sacáis (ríe). Alguna vez me he mojado pero no me gusta. Pero obviamente me gustaría que ganara la Real.
“Xabi Alonso tiene un potencial brutal”
Rekarte está a la espera de una oportunidad para entrenar. “Lo estoy deseando. Estoy en un momento en el que estoy esperando pero sin pararme, estudiando y moviéndome”.
Ha seguido de cerca al Sanse. “Tengo mucha relación con Xabi. Tiene unas capacidades que poca gente puede tener por las vivencias que ha experimentado. Una vez que haya ordenado todo eso que tiene en la cabeza, tiene un potencial brutal”
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