La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) celebró ayer una nueva comisión con los presidentes territoriales, en la que se estableció el sistema de competición para la Segunda B de cara a esta temporada que comenzará el 18 de octubre. El calendario, cuya publicación se esperaba para ayer, parece que tendrá que esperar hasta el día de hoy, aunque viendo cómo está actuando el ente federativo, cualquier cosa es posible.
La RFEF aprobó el sistema de competición que ha trascendido en las últimas semanas, con una primera fase en la que habrá cinco grupos, 10 subgrupos y en la que cada club disputará 18 partidos.
Tras esa primera fase llegará una segunda de seis jornadas en la que los tres primeros clasificados accederán directamente la siguiente temporada a la nueva Segunda B Pro y pelearán además por el ascenso a Segunda. Los tres primeros clasificados de cada uno de los cinco grupos y el mejor cuarto (16 equipos), pugnarán por una de las cuatro plazas en la división de plata en un playoff que tendrá sede única.
Los clasificados del cuarto al sexto en la primera fase buscarán el ascenso a la Segunda B Pro y el resto peleará por la permanencia.
Todos los equipos pasarán a esta segunda fase conservando la puntuación de la primera y no jugarán con los equipos que vengan de su subgrupo.
Cada una de las normativas de competición contempla disposiciones específicas para resolver situaciones de aplazamiento o suspensión por causa de la Covid-19, así como jornadas de recuperación en los calendarios para programar aquellos partidos que deban suspenderse.
Para hacerlo todo un poco más complicado, la RFEF también aprobó renombrar las categorías que organiza. De esta forma, la hasta ahora denominada Segunda B Pro pasará a llamarse Primera RFEF y estará formada por 40 equipos que quedarán divididos en dos grupos de 20; la actual Segunda División B será Segunda RFEF y la compondrán 90 clubs divididos en cinco grupos de 18. Y la actual Tercera División se denominará Tercera RFEF.
Test antes de iniciar la Liga
Además, los representantes de las distintas federaciones autonómicas y los responsables del Consejo Superior de Deportes (CSD) mantuvieron ayer una reunión telemática para tratar los protocolos sanitarios a seguir de cara al inicio de las competiciones gestionadas por la Real Federación Española de Fútbol.
La intención es que antes de comenzar, se realice una prueba diagnóstica a todas las partes implicadas, corriendo la financiación a cargo de la RFEF y las administraciones públicas.
En cuanto a la asistencia de público a los estadios, se regirá por la normativa cada gobierno autonómico, pudiendo haber diferentes criterios según la Comunidad Autónoma donde se dispute el encuentro, aunque sea la misma competición, por lo que podremos encontrarnos con casos distintos.
Además, se exigirá que cada club tenga un responsable sanitario para coordinar posibles positivos.
Source link