La Roma de Jose Mourinho tampoco estará en Champions League la próxima temporada después de que el empate contra el Bolonia (0-0) la dejara sin opciones matemáticas a falta de tres jornadas.
Se cumplirán pues tres temporadas consecutivas son los giallorossi en la máxima competición Europea. Lo intentó la Roma pero jugó un partido insulso y de poco poderío en campo contrario, adoleciendo como de costumbre la falta de pegada.
De hecho, lo cierto es que ni siquiera fue capaz de hacerse con la posesión en la mayoría de tramos del encuentro. Carles Pérez, titular esta vez, trató de dar el primer aviso serio pero se escurrió en el intento, haciendo un presagio de lo que se estaba por venir. No hubo prácticamente más oportunidades la Roma, así como tampoco el Bolonia, muy horizontal en sus jugadas.
Buscó Mourinho agitar la coctelera tras el descanso, dando entrada a Karsdorp, Pellegrini, Abraham y Zalewski de una, pero tampoco surgió demasiado efecto. Es más, le dio tiempo a Nico Domínguez y De Silvestri, del Bolonia, de ser los que más cerca estuvieron de marcar en un partido tan insulso como lo que reflejó el marcador.