La última derrota en Mallorca propició el adiós de Florentino Pérez


El Real Madrid visita Mallorca donde no conoce la derrota desde la temporada 2005/06. Una derrota que marcó un antes y después en la historia reciente del equipo blanco. El 26 de febrero de 2006, el Madrid perdió por 2-1 en Son Moix y aquella derrota del equipo entrenado por López Caro fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de Florentino Pérez.



El Madrid se adelantó con gol de Sergio Ramos y el Mallorca remontó con los tantos de Pisculichi y Arango. Todo eso bajo la atenta mirada de un Florentino Pérez desencajado en el palco porque veía que el Madrid se quedaba a 10 puntos del Barça en Liga tras haber caído ante el Arsenal (0-1) en la ida de los octavos de final de la Champions.

“Soy un tapón que era necesario quitar porque el club necesitaba un revulsivo”, decía Florentino Pérez al día siguiente de perder en Mallorca. “El club necesitaba un cambio, un revulsivo, un impulso. Hemos cambiado a muchos entrenadores y ya sólo queda que yo me vaya. Soy un tapón que era necesario quitar”. Y prosiguió: “No he sabido reconducirles. Lo de Mallorca es una prueba. Lo dijo Ramos. No es normal lo que pasó. Por coherencia, no me queda más que reconocer que algo he hecho mal. Me echo la culpa a mí”, aseguró un Florentino que dejó una frase para la historia: “He maleducado a los jugadores”.

Fernando Martín ocupó el puesto de Florentino Pérez pero por poco tiempo porque un mes después dimitió para convocar unas elecciones que ganó Ramón Calderón que se vio obligado a dimitir en 2009. Le sucedió Vicente Boluda hasta la celebración de unas elecciones a las que sólo se presentó Florentino Pérez que tres años después de dimitir en Mallorca recuperó la presidencia.


Source link