Fernando Alonso estaba totalmente desatado conduciendo su Aston Martin en el GP de Bahrein de F1 2023. Muestra de ello fue el comentario por radio que soltó en la vuelta 45, a falta de 12 giros, cuando pasó a Carlos Sainz y se colocó en una tercera posición que ya no soltaría. El piloto asturiano agarraba así un podio que se le había complicado muchísimo desde una mala salida y un posterior toque de su compañero Lance Stroll en la curva 4 de la primera vuelta.
El asturiano parecía haber perdido todas las opciones de podio porque pasaba de estar 5º, con opciones de pasar a los Ferrari en la primera parte de la carrera por su mejor ritmo de carrera y menor degradación, a tener que adelantar en pista a los dos Mercedes, con mejor ritmo que los Ferrari. Tuvo que adelantar a Russell, a un Bottas que le había adelantado en boxes por parar antes, a Hamilton y luego a Sainz.
Parecía que el podio se había esfumado pese a tener el segundo mejor coche de la parrilla. Era más rápido en pista, pero esa primera vuelta le había dejado demasiado lejos. La suerte pero, que tanto le dio la espalda el año pasado, le dio una oportunidad que no desaprovecharía en forma de problema de fiabilidad de Charles Leclerc a falta de 16 giros. Eso dejaba a Alonso en la 4ª posición, pegado a Carlos, que era tercero. Fernando sabía que lo tenía todo para hacerse con el podio porque Sainz había tenido mucha degradación de gomas.
El madrileño se defendió con uñas y dientes y opuso una gran resistencia. Hizo más de lo que podía e incluso Alonso, con mejor tracción, casi toca a Carlos. Todo quedó en un susto y Fernando acabaría pasando a Sainz para hacerse con esa tercera plaza. Fue entonces cuando soltó aliviado ese “”Yes, bye bye”, consciente de que ya podía escaparse hacia el podio. Ese comentario no tardó en hacerse viral en las redes sociales.