El Athletic y los hospitales de Cruces y Basurto, entre otros centros asistenciales, han puesto en marcha otra original iniciativa destinada a las niñas y niños internados en este tipo de centros asistenciales. La idea consiste en transformar las camisetas rojiblancas en batas para estos txikis con problemas de salud. “Hay que ver cómo se les ilumina la cara cuando la enfermera les da la bata con los colores del Athletic”, comentan los promotores de la idea.
El club rojiblanco ha aprovechado un total de 1.600 camisetas del Athletic almacenadas a lo largo de los años en sus instalaciones para reconvertirlas en batas para niños enfermos. “Innovar es copiar con estilo y en ese sentido nosotros aceptamos el reto lanzado por la revista ‘Panenka’. Recogemos el testigo con un número importante de prendas que hemos reutilizado. Se trata simplemente de cortar por detrás la camiseta del Athletic y hacer una bata”, explica Juan Carlos Ercoreca, presidente de la Fundación Athletic.
A la presentación de esta iniciativa se sumaron también Jon Vázquez Eguskiza, director de la citada entidad, además de Edurne Ormazabal, directora de Cruces, y Eduardo Maiz, director de Basurto. “Hay similitudes entre el futbolista y estos pequeños pacientes. La necesidad de trabajar a corto, medio y largo plazo; de tener fe y esperanza; de confiar en terceros. Hay que ver cómo se les ilumina la cara a los niños ingresados cada vez que la enfermera les ofrece una camiseta”, aseguró Ormazabal.
Maiz, por su parte, incidió en la humanización que supone que la estancia de estos niños en el hospital sea lo más parecido para ellos a estar en casa. Los colores rojo y blanco los tenemos todos metidos”. El Athletic ha destinado, en principio, 1.600 camisetas para esta reconversión en batas, pero no descarta ampliar la partida en función de las necesidades existentes tanto en Cruces como Basurto y otros centros asistenciales, los del IMQ incluidos.
Esta, en cualquier caso, no es la única experiencia que comparte el Athletic con estos hospitales. A las tradicionales visitas de los jugadores y jugadores de los primeros equipos en Navidad se les suma también un diploma y una medalla para los “supertxapeldunes” a la hora de comportarse durante el tratamiento.
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