El próximo miércoles 7 de septiembre comienza la Champions League 2022-23 en el Camp Nou con un FC Barcelona-Viktoria Plzen que comenzará a las 21 horas. El club checo ha puesto este martes a la venta las entradas facilitadas por la entidad azulgrana para los seguidores que quieran desplazarse con una importante novedad respecto a la pasada campaña: ya son nominales y respetan la nueva normativa para luchar contra el fraude y para evitar episodios como la invasión de la afición del Eintracht Frankfurt en el partido de vuelta de los cuartos de final de la pasada Europa League.
El Viktoria Plzen informa a sus seguidores que el precio de cada entrada es de 730 coronas checas, unos 30 euros, y comunica que sólo se podrán adquirir en la taquilla del estadio, desde las 9 horas de la mañana de este martes, y que el pago solo es posible en efectivo.
“Es obligatorio para los partidos del FC Barcelona que todo aficionado facilite en la taquilla los siguientes datos: nombre, apellidos, teléfono y correo electrónico de contacto, así como el número del documento (documento de identidad o pasaporte), que mostrará al entrar al estadio. Los sectores 523-535 están reservados para los seguidores del Viktoria y el club local seleccionará posteriormente los asientos. Por lo tanto, no será posible elegir su propio asiento al comprar”, explica el Viktoria Plzen en un comunicando.
Y concluye: “Cada aficionado recibirá un cupón después de la compra en base al cual se le enviará a su dirección de correo electrónico una entrada para el partido. Por lo tanto, le pedimos que verifique cuidadosamente la exactitud de la dirección de correo electrónico que informó. Las entradas se enviarán por correo electrónico a más tardar el lunes 5 de septiembre”.
Tras aquel Barça-Eintracht Frankfurt con mayoría aplastante de seguidores alemanas en el Camp Nou, Joan Laporta avanzó en rueda de prensa que “las entradas serán nominativas en las competiciones internacionales que juegue el Barça en el Camp Nou. No lo hemos querido hacer nunca porque incomoda y molesta a los socios que tienen una conducta correcta, normal y corriente”.