‘Supervivientes‘ es el ‘reality’ más extremo de nuestra televisión. Los concursantes pasan semanas en Honduras combatiendo el hambre, las infernales picaduras de los pichos de los Cayos Cochinos y soportando a veces condiciones meteorológicas adversas. En ese contexto, lo único que tienen los supervivientes es el apoyo de sus compañeros, por eso se suelen crear lazos muy fuertes entre algunos concursantes. Y por eso también una expulsión puede ser un auténtico drama.
Eso es precisamente lo que sucedió este jueves durante la gala de ‘Supervivientes 2022‘. La audiencia decidió que el nuevo expulsado -aunque no definitivo, ya que irá ahora con Marta Peñate– fuera Yulen Pereira. El espadista perdió en las votaciones contra Ana Luque, que muy emocionada no podía creer que el público la hubiera salvado.
Una noticia que afectó muchísimo a Anabel Pantoja. La colaboradora de ‘Sálvame‘ y el deportista han comenzado una relación en el ‘reality’ y, junto a Ana Luque, Yulen era el mayor apoyo de Anabel en la isla.
Entre lágrimas, Yulen abrazó a su chica, que al principio intentó aguantar la compostura. “El mayor regalo de esta edición es que esté ella aquí. Esta gritona, caprichosa y marimandona que sé que va a llegar muy lejos”, aseguraba el concursante, roto. “Te quiero“, le decía Anabel antes de besarse con su nueva pareja.
Yulen y Anabel Pantoja en ‘Supervivientes 2022’.
“La verdad es que lo que puede pasar en cualquier programa de televisión es una auténtica maravilla y el factor sorpresa es lo que nos tiene enganchados siempre a los programas de televisión. O sea que muchísimas gracias a los dos”, les dijo Jorge Javier Vázquez.
Anabel Pantoja se derrumba tras la marcha de Yulen Pereira
Como decíamos, a pesar de que Anabel intentó aguantar, cuando Yulen se marchó de la Palapa no pudo evitar derrumbarse en directo. El llanto descontrolado de la concursante emocionó incluso al presentador: “Ay, Anabel, que estoy llorando hasta yo“.
Anabel Pantoja en ‘Supervivientes 2022’.
“Le prometí que no iba a llorar no puedo aguantar. Me tendría que haber ido yo era su sueño”, aseguraba Anabel, completamente destrozada. “No quería llorar. Se lo he prometido llevo días entrenándome pero esto es duro Jorge y sin él se me va cuesta arriba. Está Ana, pero se me va la otra pierna”, aseguraba, muy afectada tras la expulsión de su novio (que, recordemos, no es definitiva).