La vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, anunció este miércoles tanto en el Congreso como en un foro económico que las pequeñas y medianas empresas recibirán inversiones por al menos 7.000 millones con cargo a las ayudas europeas. De estos, 2.000 millones son ayudas del programa específicas. También percibirán otros 5.000 millones del plan de digitalización financiado por los fondos de la UE. Además, los planes que ultiman en los ministerios de Transición Ecológica y en Industria reservan partidas notables para las pymes.
España recibirá unos 70.000 millones de subvenciones de Bruselas que repartirá entre los proyectos presentados por administraciones públicas y empresas. Las grandes compañías cotizadas españolas ya han registrado centenares de proyectos por un valor superior a los 100.000 millones de euros.
Solo entre Endesa, Iberdrola y Naturgy han presentado más de 360 proyectos para captar más de 53.000 millones de euros de los fondos europeos. Iberia, de la mano de Aena y Airbus, está formando un consorcio para absorber otros 11.000 millones. Las grandes constructoras cotizadas españolas han presentado cerca de 2.200 proyectos por valor de más de 100.000 millones.
Ante el temor de que todas las ayudas europeas acaben en manos de las grandes empresas, la ministra de Economía aclaró que además de los 2.000 millones, las pymes tendrán una “participación muy protegida y especial” en aquellos proyectos en los que coexistan con las grandes empresas. “Van a estar en el corazón de la recuperación económica como lo han estado en el de todas las medidas que hemos adoptado para responder a la pandemia”, replicó al portavoz económico de Esquerra Republicana (ERC), Joan Capdevila.
Calviño explicó además que los proyectos presentados por las grandes empresas están configurados para que ejerzan un efecto tractor del que se beneficien las pymes. Además, en muchos de estos proyectos las grandes compañías van de la mano de empresas medianas y pequeñas.
Más tarde, en otra intervención pública, la ministra precisó que el plan de recuperación elaborado por el Gobierno para invertir el dinero procedente de Bruselas incluye una partida adicional de “aproximadamente 5.000 millones de euros” para la transformación digital de las pymes. “España es un país de pymes, conforman el grueso de nuestro tejido productivo, y hemos de apoyar y acelerar su digitalización para que no pierdan el tren de las oportunidades que se van a abrir en estos próximos años”, manifestó durante el foro Fondos Europeos, las claves para la recuperación organizado por EFE y KPMG.
Fuentes oficiales explicaron que otros departamentos como el de Transición Ecológica o Industria también tienen reservadas importantes partidas para las pymes. Por eso, Calviño recalcó que estas empresas “han sido las principales beneficiarias” de la respuesta económica a la crisis, y enumeró las ayudas que han recibido como los ERTE, las prestaciones para autónomos, los avales del ICO y las transferencias a las comunidades para ayudas a los comercios afectados por las restricciones. Finalmente, en el ámbito de las reformas, dijo que espera sacar “pronto” a consulta pública la nueva Ley de Crecimiento Empresarial que, según avanzó, incluirá medidas contra la morosidad que padecen las empresas.
Quita de deuda del BCE: “Es un debate artificial”
La vicepresidenta de Economía, Nadia Calviño, calificó este miércoles que el debate sobre la propuesta para que el Banco Central Europeo (BCE) condone parte de la deuda pública a los países de euro es “artificial y estéril”. La ministra contestó así al diputado del PP Mario Garcés durante la sesión de control al Gobierno celebrada este miércoles en el Congreso. Garcés instó a Calviño pronunciarse sobre el manifiesto, publicado en EL PAÍS, firmado por un grupo de intelectuales y políticos liderados por el economista francés Thomas Piketty en favor de esa condonación. La propuesta también fue suscrita por la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, o el responsable económico de Podemos, Nacho Álvarez.
Calviño evitó profundizar en el asunto y se refirió a sus “prioridades” que son controlar la pandemia de covid-19, avanzar en la vacunación, el apoyo a familias, empresas y autónomos para afrontar la crisis y la ejecución rápida del Plan de Recuperación.
“El resto de debates que no suman a este objetivo colectivo y compartido no son ni prioritarios ni productivos, son artificiales y estériles”, indicó la vicepresidenta.
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