Charles Leclerc,
igual que su jefe Mattia Binotto
, está seguro de que el Ferrari de 2021 supondrá un paso al frente importante para la firma italiana en comparación al coche de 2020, un monoplaza que tuvo muchos problemas de velocidad en recta por culpa de su gran resistencia al aire. Según Mattia, estos aspectos han sido solventados y la velocidad “no debería ser un problema”. Lo mismo opinó Charles, positivo por ver el gran trabajo que realizó la fábrica de Maranello para desarrollar una parte trasera del coche nueva y mejorar la aerodinámica del monoplaza, lo máximo que pudieron hacer en Ferrari ante las limitaciones de desarrollo de los coches del pasado año impuestas por reglamento. No obstante, Leclerc dejó claro que la posición que ocupen en la parrilla no se podrá saber hasta la primera carrera del año puesto que no conoce el progreso que han realizado el resto de equipos en sus nuevos coches para la campaña 2021, algo sobre lo que se saldrá de dudas en la primera carrera del año, puesto que en los test de pretemporada todos suelen esconder sus cartas.
“Es muy difícil contestar a esa pregunta antes de la primera carrera, para ser honesto. Claramente parece que hemos dado un gran paso al frente. Se ha hecho mucho trabajo en Maranello. Desde el inicio del año hemos estado aquí (en Maranello) con Carlos empujando mucho y viendo las mejoras del coche y por ahora todo pinta positivo sobre el papel, pero necesitamos ver qué ha hecho el resto (de equipos) para entender dónde estamos en comparación a ellos, comentó.
“Estoy confiado de que el equipo es mejor y ahora debemos entender en la primera carrera dónde estamos”, dijo Charles en la presentación del equipo Ferrari de este viernes.
Bandera blanca a Sainz
Además, tras su tensa relación con Vettel de los dos años anteriores, Charles Leclerc dejó claro que, pese a que tanto él como Carlos Sainz quieren ganar su particular batalla entre compañeros de equipo en pista, lo primordial en la situación actual de Ferrari es pensar en el equipo, evitar peleas en pista y trabajar juntos fuera del asfalto para hacer que Ferrari regrese a las posiciones de honor en el menor tiempo posible.
“Es un compromiso. Tenemos que empujar por el equipo. Carlos quiere batirme y yo le quiero batir a él también. Una vez que estemos en la pista obviamente tendremos que tener cuidado de luchar entre nosotros. Hay que tener la visión de hacerlo lo mejor posible por el equipo. Lo más importante es gestionar la separación de lo que pasa en el coche y fuera del coche y siempre que estemos fuera del coche trabajemos juntos para el desarrollo del coche y lo mismo pasa en el coche, con la estrategia y etc. Carlos es muy competitivo pero él también está aquí para beneficiar al equipo igual que yo”, comentó el monegasco.
El piloto de 23 años, que recientemente superó el coronavirus, aseguró estar plenamente preparado para los test de pretemporada de F1 (del 12 al 14 de marzo) y para iniciar la campaña al mejor nivel.
“Estoy completamente recuperado. Me siento completamente bien. Todo ha vuelto a la normalidad y todo va bien. Hemos hecho algunos test con los coches antiguos y me siento muy preparado. El año pasado mejoré masivamente en la gestión de los neumáticos y espero dar otro paso más este año. He mirado las carreras pasadas para entender qué podíamos mejorar como equipo y yo mismo en el coche y tratar de mejorar”, concluyó.
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