El gobierno del presidente Joe Biden está siendo presionado por una legisladora demócrata clave, la congresista Elissa Slotkin, para que considere la designación de grupos supremacistas blancos foráneos como terroristas extranjeros sujetos a acciones del gobierno de Estados Unidos.
Si la administración de Biden tomara el paso sin precedentes de incluir a estos grupos como Organizaciones Terroristas Extranjeras, o incluso una designación menos estricta, ayudaría a frenar las peligrosas organizaciones supremacistas blancas, argumentó Slotkin en una carta al secretario de Estado, Antony Blinken, a la que tuvo acceso Reuters.
“También daría al gobierno de Estados Unidos más herramientas para enfrentar y advertir a los estadounidenses que contactan, apoyan, capacitan y se unen a estos grupos (extremistas supremacistas blancos)”, dijo Slotkin, una exanalista de la CIA que preside un subcomité de la Cámara de Representantes que se centra en inteligencia y contraterrorismo.
El Departamento de Estado declinó hacer comentarios. La solicitud de Slotkin no había sido informada con anterioridad.
Slotkin pidió al Departamento de Estado que considere incluir en la lista a más de una docena de organizaciones, incluido el Grupo de Acción Nacional neonazi, fundado en Reino Unido y prohibido allí en 2016. En un informe antiterrorista estadounidense de 2018 fue descrito como un grupo terrorista que promueve la violencia contra políticos y minorías.
También nombró al neonazi Movimiento de Resistencia Nórdico, que el informe describió como una organización transnacional antioccidental detrás de ataques violentos contra musulmanes y grupos de izquierda, entre otros.
Slotkin tiene una perspectiva única sobre la amenaza que representa el extremismo violento. Realizó tres giras en Irak como experta en milicias de la CIA y fue una alta funcionaria del Pentágono antes de ser elegida al Congreso en 2018. Como legisladora, se ha centrado en el extremismo nacional.
Desde 2018, los supremacistas blancos han llevado a cabo más ataques letales en Estados Unidos que cualquier otro movimiento extremista violento nacional, dijo el departamento en un informe en octubre.
(Reuters)
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