Máxima emoción en el partido de vuelta del playoff de ascenso a Primera División. El Levante y el Deportivo Alavés se la juegan hoy (21h) a una carta en el Ciutat de València con una ligera ventaja para los locales, ya que tras el 0-0 de la ida les vale un empate al final de la prórroga para subir.
En este encuentro decisivo ambos buscarán la victoria que les permita lograr el sueño de retomar la elite. El Levante llega en un gran momento tras encadenar cuatro victorias y un empate, y confiado tras haberse impuesto al Alavés en dos de los tres partidos que han jugado en Liga este curso y en los que el cuadro vasco ha sido incapaz de marcarle. Estos precedentes llenan de moral al cuadro local, firme en su objetivo.
El Ciutat de València presentará la mejor entrada de la temporada, ya que el club ha repartido todas las entradas disponibles y el estadio rozará los 24.000 espectadores. Javi Calleja, realizó ayer por la tarde el último entrenamiento y en principio podrá contar con Rober Pier, Postigo y Álex Muñoz, aquejados de distintos golpes de la ida en Vitoria. Si alguno de ellos no se recuperase del todo, el portugués Rubén Vezo podría entrar en el once inicial.
Para el centro del campo no se esperan novedades con Iborra y Pepelu en el eje de la medular y De Frutos y Joni en los costados. Brugué y Bouldini serían los dos jugadores más adelantados de un Levante en busca de su sexto ascenso a Primera División.
El Alavés por su parte regresa al estadio donde consumió el descenso el pasado año para intentar desquitarse con la vuelta a Primera. Luis García Plaza no podrá contar con Salva Sevilla por lesión, ni con Antonio Blanco y Jesús Owono, con sus selecciones nacionales. Todo indica que se repetirá el mismo once que jugó en Mendizorroza en la ida.
Los vitorianos no han conseguido ganar al Levante en ninguno de los tres partidos de esta temporada y ni siquiera han anotado, pero no estarán solos. Más de 400 seguidores estarán en las gradas del Ciutat de Valencia para alentar a su equipo.
Será un partido en el que la psicología jugará un papel fundamental y en el que si persiste el empate al finalizar los 90 minutos, se extenderá con una prórroga sin penaltis