PHOENIX- Un recluso condenado a pena de muerte en Arizona por la muerte de un niña de 4 años en 1994 fue liberado este jueves.
Barry Lee Jones había pasado 29 años tras las rejas por asesinato, abuso infantil y agresión sexual por la muerte de la hija de su novia. Un juez del condado de Pima ordenó la liberación de Jones después de aprobar un acuerdo entre su abogado y los fiscales quienes dijeron que un nuevo examen médico del caso no respaldaba la conclusión de que Jones causó la lesión de la niña. Jones se declaró culpable de un cargo por asesinato.
A principios de mayo de 1994, Jones llevó a la niña ya su madre a un hospital de Tucson, donde la niña fue declarada muerta al llegar. Se determinó que su muerte fue causada por una laceración del intestino delgado debido a un “traumatismo abdominal cerrado”.
Las autoridades habían alegado previamente que Jones había golpeado y agredido sexualmente a la niña.
La Oficina del fiscal general de Arizona, que acordó que la condena por asesinato en primer grado de Jones debería ser anulada, también añadió que la evidencia aún apoyaba una condena por asesinato en segundo grado porque Jones, quien estaba cuidando a la niña en ese momento, la había dejado morir como resultado de sus heridas.
ARGUMENTAN FALLAS EN LA INVESTIGACIÓN
Un juez federal pidió la liberación de Jones en un fallo de julio de 2018 y concluyó que el abogado anterior de Jones no había investigado adecuadamente si las lesiones de la niña sufrieron durante el tiempo que estuvo a solas con Jones.
Los expertos habían testificado que el niño pudo haber resultado herido antes. El fallo del juez fue confirmado por un tribunal de apelaciones, aunque Jones permaneció en prisión.
Sin embargo, la Corte Suprema de Estados Unidos revocó la decisión hace un año y el juez Clarence Thomas dijo que los tribunales federales generalmente tienen prohibido aceptar nuevas pruebas de asistencia ineficaz de un abogado que podría ayudar a los presos.
Con Jones aún tras las rejas, sus abogados llegaron a un acuerdo con los fiscales para su liberación.
Según el acuerdo, una vez que se anularon sus condenas y su sentencia de muerte, Jones se declaró culpable de un cargo de asesinato en segundo grado en relación con no buscar atención médica para la niña. Fue sentenciado a 25 años de prisión y se le dará crédito por el tiempo cumplido.
“El señor Jones pasó casi tres décadas en el corredor de la muerte de Arizona a pesar de la evidencia convincente de que era inocente de los cargos de haber agredido fatalmente” a la niña, dijo Cary Sandman, el abogado de Jones, quien reiteró que su cliente no agredió sexualmente a la niña.
Ahora que se anuló la sentencia de muerte de Jones, Arizona tiene 110 personas en el corredor de la muerte.
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