El escolta de los Chicago Bulls, Lonzo Ball, confirmó que se perderá la temporada 2023-2024 de la NBA, pero que se siente bien posicionado, “en el camino correcto”, después de haber pasado por quirófano en marzo para realizarse un trasplante de cartílago en la rodilla izquierda.
Durante una aparición el lunes por la mañana en el podcast From the Point by Trae Young presentado por el base de los Atlanta Hawks, Lonzo Ball, que no juega un partido desde el 14 de enero de 2022, explicó que su recuperación ha sido un proceso largo, pero que se siente alentado después de su última operación, la tercera en la misma articulación.
“Cuando me lesioné por primera vez, realmente no sabíamos qué era”, aseguró Ball. “Estaba viendo a todo tipo de médicos diferentes y cosas así. Estaba yendo de arriba hacia abajo. Eso fue muy difícil para mí porque simplemente no sabía cómo iba a ser el próximo día”.
“Al menos ahora, me operaron. Tenemos un plan para seguir adelante. Hemos estado siguiendo el plan. Estoy en el camino correcto. Con suerte, todo funciona. Solo lo dejo en manos de Dios y hago lo mejor que puedo y vivo con los resultados”.
Ball firmó un contrato de cuatro años y 80 millones de dólares con los Bulls en 2021 y jugóo 35 partidos durante la temporada 2021-22, pero las lesiones le han impedido pisar la cancha desde entonces. El vicepresidente de los Bulls, Arturas Karnisovas, dijo en la noche del draft en junio que el equipo no esperaba que Ball jugara en esta temporada.
Chicago llegó a liderar la Conferencia Este antes de la lesión de Ball esa temporada, con un récord de 27-13 cuando se lesionó la rodilla y pasando la mayor parte de la primera mitad del año en la cima de la conferencia. El equipo no ha podido compensar su ausencia, terminando con un récord de 40-42 la temporada pasada y perdiendo en el torneo de play-in contra Miami sin él.
“Va a ser un gran ‘¿y si…?’”, dijo Ball. “Me siento mal, solo por los general managers [de los Bulls], porque siento que armaron el equipo perfecto a mi alrededor. Sentí que esa fue la vez que más estuve involucrado en una organización. Y finalmente conseguí el equipo perfecto, que sentí que podría encajar con mi juego y jugar a mi manera y realmente hacer lo que quería hacer”.
“Esa lesión —todavía la estoy superando— pero esa me afectó desde el principio porque sentí que teníamos una oportunidad y nunca llegamos a ver lo que era”, zanjó.