El presidente López Obrador durante su conferencia diaria en Palacio Nacional este 19 de diciembre.Sáshenka Gutiérrez (EFE)
Andrés Manuel López Obrador ha afirmado que el atentado en contra del periodista Ciro Gómez Leyva ocurrido la noche del jueves pudo haber sido parte de un plan orquestado por grupos contrarios a su Gobierno con el objeto de provocar una desestabilización. Si bien el mandatario federal dijo que ha pedido a las autoridades de la Ciudad de México –donde sucedió el ataque– que no descarten ninguna línea de investigación, se ha decantado por la posible existencia de un plan maquinado por grupos inconformes con sus políticas, aunque no presentó indicios o pruebas que sustentaran esta afirmación. “Puede ser un caso vinculado al proceso de transformación que estamos llevando a cabo y que no les gusta a algunos. Por ejemplo, el que sea un grupo de la delincuencia. Se hablaba de que hubo un reportaje de Ciro tres o cuatro días antes de este atentado y que puede ser una respuesta. Pero también, que grupos contrarios a nosotros, para afectarnos, hayan llevado a cabo un acto con esas características”, ha dicho el presidente en su conferencia diaria.
López Obrador ha convocado a la población, entre la que existe un fuerte respaldo a su Gobierno, a aportar elementos que permitan a la Fiscalía capitalina descubrir quiénes participaron en el ataque al periodista, quiénes lo ordenaron y con qué propósitos. “La mejor recompensa [que podemos ofrecerles] es que nos van a ayudar a evitar, si es que existe, un plan de desestabilizar la vida pública del país. Que todos nos ayuden, porque somos mayoría los que queremos la transformación, el cambio, entonces la misma gente nos puede ayudar”, ha dicho el mandatario. “Lo menciono porque hay algunos que piensan que no ha habido cambios en el país y piensan que las mismas estrategias que posiblemente han aplicado antes podrían dar resultados, aun en circunstancias distintas y en otros tiempos. Entonces no está de más decirles: no va a tener efecto político lo que ustedes están pensando, porque el pueblo tiene mucha información y ya no se deja manipular”.
Gómez Leyva, un periodista de larga trayectoria que ha mostrado posiciones contrarias al proyecto de López Obrador, fue atacado por personas armadas la noche del jueves mientras se dirigía a su casa después de salir del medio para el que trabaja, Imagen. “Todo indica que alguien me quiso matar”, escribió Gómez Leyva en Twitter tras librar el ataque gracias al blindaje de su vehículo, que impidió el paso de las balas. López Obrador ha dicho este lunes que pidió llegar al fondo de las investigaciones, pero de entrada negó que el móvil pudiera ser la labor profesional de Gómez Leyva, en un país donde se ha recrudecido la violencia contra los periodistas. “Le he pedido a la jefa de Gobierno [Claudia Sheinbaum] que se haga una investigación a fondo para saber qué sucedió, no descartar ninguna hipótesis. Yo creo que la única hipótesis que se debe de descartar, aunque eso va a corresponder a la autoridad, es que nosotros, el Gobierno que yo represento, no es un Gobierno represor, nosotros no silenciamos a nadie, somos respetuosos de los derechos humanos y el principal es el derecho a la vida”, ha afirmado.
El presidente mexicano expresó su solidaridad con Gómez Leyva, pero, como hiciera el viernes, horas después del ataque, volvió a recordar sus diferendos con el periodista y otros comunicadores y analistas. “Ya es de dominio público que nosotros tenemos diferencias con los voceros del conservadurismo, entre los que está, y lo digo con mucho respeto, Ciro, [Joaquín] López-Dóriga, Denisse Maerker y Claudio X. González, aunque no es periodista sino empresario, y [Carlos] Loret de Mola. Y además son diferencias que vienen de lejos, porque dicen: ‘es que se estigmatiza en las mañaneras’, porque ahora se hacen las víctimas, si yo les recordara lo que han hecho, todo ese grupo, que son de la élite, de lo más selecto de los medios de información, que ganan hasta un millón de pesos mensuales y ni que fueran lumbreras, ni que fueran inteligentes, así que tienen una misión, proteger intereses de grupos”.
El atentado contra Gómez Leyva provocó muestras de solidaridad de parte del gremio periodístico. Para López Obrador, se trata de una campaña en la que se intenta responsabilizar a su Administración del ataque. “Les recomendaría que ya no sigan haciendo el ridículo, porque no van a lograr nada, al contrario, se van a seguir hundiendo en el pantano de las mentiras, del hampa del periodismo. Porque, la verdad, es de lo más bajo aprovechar esta situación lamentable para hacer una campaña y culparme. No tengo problemas de conciencia y vamos a seguir luchando, porque es una transformación que nos ayuda a todos, a ellos mismos, a sus familias, no se puede vivir con un régimen mafioso, no pueden gobernar México malhechores”, ha dicho.
Suscríbase aquí a la newsletter y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este país
Source link