Los Celtics asaltan Miami con autoridad y empatan la eliminatoria

Los Boston Celtics tan solo necesitaron 20 minutos de la primera mitad para resolver la papeleta en Miami. Con un festival de perímetro acompañado de una defensa férrea, la franquicia de Massachussets rompió el factor cancha en Florida para situar el 1-1 en las Finales de la Conferencia Este contra los Heat, que cayeron por un inapelable 102-127.

Un parcial inicial de 18-8 en cinco minutos engañó a la parroquia local, que pronto se dio cuenta de que el conjunto visitante venía con los deberes hechos y la intensidad adecuada para superar el golpe inicial en el partido. A base de triples, Boston construyó un parcial de 27-62 favorable hasta el descanso que dejó el choque visto para sentencia camino de los vestuarios. El 45-70 al receso enfrió la ardiente grada de Miami y le dio a los Celtics la mayor ventaja de su historia al descanso en unos playoffs. 

Con un 9 de 11 en triples en el primer período, los visitantes armaron un 0-17 de parcial que noqueó a un rival impotente ante el espectacular acierto de los pupilos de Ime Udoka. En el segundo cuarto, fue Jayson Tatum quien se puso agresivo para amedrentar a un rival entregado a un Jimmy Butler que lo intentó en solitario durante un tramo del tercer cuarto después de un primer tiempo regular.

Tatum volvió a dar un recital de eficiencia y terminó con 20 de sus 27 tantos totales en la primera mitad. En el primer partido ya había avisado con su récord en unos playoffs, 21. Los Heat no ajustaron sus deficiencias en la victoria inaugural de la eliminatoria, y ese conformismo, especialmente en defensa, les condenó a recibir el rapapolvo del rival. Desde 1972, los Celtics no metían tantos puntos al descanso en unos playoffs.

Jaylen Brown y Marcus Smart, increíblemente liberados en varios de sus tiros de perímetro, acompañaron a Tatum con 24 puntos cada uno. La presencia del Mejor Defensor del Año junto a Al Horford, ambos titulares tras perderse el primer asalto, dio otra marcha al equipo de Ime Udoka. El escolta, además, logró repartir 12 asistencias, su máximo en unos playoffs.

Grant Williams, autor de 19 puntos y un eficiente 5 de 7 en tiros de campo en 32 minutos, siguió luciéndose partiendo desde el banquillo. En una noche para los triplistas, Payton Pritchard siguió en su buena línea con 10 puntos. En el juego interior, Horford y Robert Williams le dieron más intensidad y físico al entrenador, que pudo contrarrestar con su presencia el juego de Adebayo, una de las perlas del rival.

Por parte de Miami, tan solo Butler amagó con un intento de reacción al anotar 16 de sus 29 puntos totales en el tercer período, aunque lo más cerca que lograron situarse los locales fue a 18 de distancia, todo un mundo. Tyler Herro no fue un factor para mantener a los suyos en lucha y terminó con 11 tantos, y tan solo Gabe Vincent (14) y Victor Oladipo (14) hicieron acto de presencia. P.J. Tucker y Bam Adebayo, sobre todo en defensa, estuvieron completamente desaparecidos para el conjunto de Erik Spoelstra.

Boston pudo retirar a sus titulares en el último cuarto después de llegar a situar la ventaja en una máxima de 34 puntos, y la atmósfera del choque se diluyó en la irrelevancia de los minutos de la basura hasta el bocinazo final. No más color anoche que el verde, y la superioridad de Boston mandará a los Heat bien calientes a la cama antes de viajar a Massachussets.

“Tiene que dolernos. Han intentado avergonzarnos y lo han conseguido”, valoró Butler en sala de prensa. “En general, tenemos que ser mucho mejores”.