Los Angeles Clippers no están preparados para despedirse de su actual proyecto todavía. No al menos según transmiten el entrenador y la plantilla. Después de quedarse lejos de la lucha por el anillo por segunda temporada consecutiva, Ty Lue quiso incidir en la enorme decepción que la eliminación en primera ronda contra los Phoenix Suns supone para el grupo. En gran parte, las dolencias del conjunto angelino se deben a la mala suerte con las lesiones. En la presente campaña, no pudieron contar con Paul George desde el 21 de marzo y luego vieron como Kawhi Leonard se perdía los tres últimos encuentros de los playoffs.
“Hay esperanza en el hecho de que con PG y Kawhi sanos no hemos perdido ninguna eliminatoria todavía”, valora Lue. “Siempre está ahí, al fondo de la cabeza. ‘¿Y si…? Es muy fácil decirlo, porque muchos jugadores se han lesionado. Esta ha sido nuestra fortuna estos últimos tres años”, añade.
La era de las decepciones en LAC
Nunca al 100% físico
– 2019-20: pierden las semifinales de conferencia contra los Nuggets tras liderar por 3-1 en la eliminatoria. Lue era el asistente de Rivers, que marcha.
- 2020-21: con Lue al frente del cuerpo técnico alcanzan las finales de conferencia, pero caen ante los Suns tras la grave lesión de Kawhi en la ronda previa.
- 2021-22: No alcanzan los playoffs después de perder en el play-in sin la participación de Kawhi, lesionado a lo largo de toda la temporada.
- 2022-23: pierden en primera ronda contra los Suns sin contar con PG ni Kawhi, irregulares a nivel físico todo el año.
Cuando el exjugador debutó como técnico jefe de los Clippers, el equipo alcanzó las Finales de la Conferencia Oeste. La baja de Leonard, que se rompió en las semifinales los ligamentos cruzados de la rodilla, supuso un lastre demasiado pesado para el equipo, que terminó cediendo después de alcanzar por primera vez en la historia la ronda previa a las Finales de la NBA. “Si miras atrás, a mi primer año, el equipo hizo cosas muy buenas… ahora debemos tomarnos un tiempo, dejar que los entrenadores, todos, tengamos un descanso, reflexionar sobre la temporada y volver para ser mejores de lo que hemos sido este año”, reflexiona el técnico.
Con George y Leonard sobre la pista, los Clippers han acumulado un balance de 24 victorias y 14 derrotas este curso. Solo compartieron 38 partidos de 82 posibles por culpa de varias lesiones y la ya habitual gestión de carga física, lo que evitó la participación regular de ambos en la dinámica del grupo. Sin ellos, su balance fue de 20 victorias y 24 derrotas. Si L.A. llegó a los playoffs fue gracias a la incorporación de Russell Westbrook después del parón del All Star en febrero. “Él salvó nuestra temporada, en el sentido de clasificarnos”, asegura Lue.
La redención de Westbrook y la incógnita del verano
George, que ha debido conformarse con ser actor pasivo en el momento decisivo de la temporada, invita al base a volver a firmar con ellos. “Ha jugado al nivel del Russ que conocíamos y sabíamos que todavía era. Son decisiones, pero yo aposté porque él viniera aquí, y sin duda apostaré para que vuelva”, explicó el alero. “Aporta mucho al equipo, es increíble verle. Simplemente creo que es el líder que necesitamos en el puesto de base”.
El problema es que Westbrook será agente libre y, después de su nivel en este tramo final de curso, podría haberse ganado más de un pretendiente en el mercado. En la eliminatoria contra los Suns, el base promedió 23,6 puntos, 7,6 rebotes y 7,4 asistencias por partido. L.A. solo dispondrá de 3,8 millones de excepción salarial para ofrecerle la próxima temporada si no hay otros movimientos.
“Será la primera vez en mi trayectoria que podré tomar una decisión. Me encanta estar aquí. Esta temporada ha pasado de todo, pero amo estar aquí”, asegura el nativo de L.A. En un curso que empezó como miembro de los Lakers, donde nunca encajó del todo y terminó muy mal con sus compañeros, directivos y afición, la “montaña rusa” de la liga le envió a los Utah Jazz en un traspaso del cierre del mercado y pocos días después, tras ver su contrato multimillonario rescindido, le dio la oportunidad de volver a su ciudad con el rival de su exequipo.
A pesar de que probará fortuna en el mercado, Westbrook abonó el terreno para un hipotético regreso con unos Clippers a quienes ha salvado pero que también le han salvado de sí mismo. “Tenemos un objetivo único, ganar el campeonato. Tenemos los intangibles para ello, pero entendemos que necesitamos a un equipo sano al completo. Espero que Kawhi y Paul lo entiendan también”, explica. Más comedido y eficiente, más líder, el base de 34 años ha subido su valor de forma exponencial en la última semana. Bien dirigido, aceptado por sus compañeros, sigue siendo una fuerza a tener en cuenta. Se nota incluso en sus declaraciones.
La edad aprieta a las tres estrellas de L.A. George cumplirá en cuestión de días 33 años, y Leonard, a sus 32, encara otra ardua recuperación tras confirmarse que sufre una rotura de menisco. Steve Ballmer, el propietario de los Clippers, debe meditar ahora cuál es la hoja de ruta. En total, si cumplen su contrato, la dupla que pretendía cambiar la historia angelina cobrará casi 500 millones de dólares en contratos, pero su presencia juntos sobre la pista ha sido tan solo del 30,2% (118 de 390 partidos posibles).
Nada se descarta e incluso las palabras de Lue denotan cierta melancolía con olor a despedida. Es eso o mera desesperación para una situación que se prolonga en el tiempo. La salud puede romper, de forma definitiva, el colosal proyecto de los vecinos de los Lakers, que vuelven a ser los número uno en L.A.