Ya hace varias semanas volvimos a recordar en Mundo Deportivo la necesidad de resolver en la Liga Profesional femenina uno de los temas conflictivos y que llevan persiguiendo a la competición desde principios de la nueva competición profesional. Tiene que ver con el conflicto del recibo arbitral. Ocho meses se cumplieron ayer 8 de junio de la denuncia presentada por la Liga Profesional Femenina al CSD en torno al recibo arbitral que remite la RFEF por cada partido arbitrado en la competición.
Fue el 8 de noviembre cuando la patronal femenina elevaba la queja al Consejo Superior de Deportes. Y, a día de hoy, todavía no hay respuesta alguna desde el órgano estatal del deporte español. Respuesta que ahora mismo es urgente.
Como hemos venido contando en MD, el 15 de septiembre del año pasado y para frenar la huelga arbitral por sus salarios, Federación y gobierno acordaron que finalmente el sueldo arbitral por partido en la competición femenina sería de 4.050 euros (1.066 euros por partido para la colegiada, 1.006 para la asistente y 250 para la cuarta árbitra). En este acuerdo además se fijó que el CSD aportaría 350.000 euros para la mutualidad de las árbitras y la RFEF otros 350.000 euros a los clubes para ayudar a los clubes al pago de estas cantidades. Entre ellas las correspondientes a dietas, desplazamientos etc..
Resulta que desde entonces la Federación Española de Fútbol viene enviado a los 16 clubes femeninos de la competición un recibo mensual de 14.600 euros.
Para hacernos una idea, cada club local asume los gastos arbitrales del encuentro. Según lo pactado el 15 de septiembre, esto supone 60.750 euros por los quince partidos que disputan en casa en la competición. Nada que ver con los 225.000 que tendrían que pagar de acuerdo al recibo arbitral que está reclamando la Federación Española de Fútbol. Son casi 165.000 euros de diferencia para clubes de una competición que acaba de nacer.
Obligación de los clubes según el Reglamento federativo
El problema surge si nos acogemos al Reglamento General de la RFEF donde deja claro en su artículo 122 relativo a la obligación de los clubes que deben pagar puntualmente “Las prestaciones, honorarios, importe económico de los recibos arbitrales por todos los conceptos, indemnizaciones y demás obligaciones económicas previstas estatutaria o reglamentariamente, establecidas por los órganos competentes, o declaradas exigibles por los de orden jurisdiccional.”
Algo que concreta más adelante en su artículo 211 relativo a los requisitos para la inscripción en cada una de las categorías. Y donde dice textualmente que para poder hacerlo deben “Estar, en el momento de la inscripción, al corriente de pago de todas las obligaciones económicas con la RFEF y/o las Federaciones de ámbito autonómico derivadas de la temporada anterior y de todos y cada uno de sus equipos participantes en competiciones oficiales.”
Es decir, a día de hoy y según ha sabido MD; hay clubes que no están abonando desde el principio de temporada este recibo arbitral según las cantidades reclamadas por la RFEF. Si esto no se soluciona, todo indica que la RFEF podría no dejarles inscribirse para la campaña 2023-2024 acogiéndose a este cumplimiento reglamentario y obligatorio. Empezando con los clubes que no cuentan con un club masculino en la Liga Profesional de Primera y Segunda división. Incluso otros de los clubes con sección masculina en el fútbol profesional, tampoco lo habrían abonado. Ahora mismo, según fuentes consultadas por MD, sólo los grandes como Real Madrid, Barcelona y Athletic lo habrían abonado además de todos aquellos clubes femeninos con equipo masculino en la Liga profesional que van a participar en UEFA la próxima temporada: Atlético de Madrid, Real Sociedad, Villarreal, Betis y Sevilla. De lo contrario no tendrían la licencia UEFA para participar en competiciones europeas masculinas la temporada 2023-2024. Todo esto explica la necesidad de solucionar el problema cuanto antes.