Es sólo el inicio de la temporada y habrá tiempo para desarrollar teorías y tesis sobre la incidencia y relevancia de los fichajes de este verano, pero los primeros indicios apuntan a otro golpe de acierto de Olabe y de su equipo de reclutamiento. Sólo han transcurrido cinco partidos del curso, pero en todos ellos la trascendencia de los jugadores contratados en la última ventana de mercado ha sido indiscutible. De hecho, en las tres victorias y el empate cosechados por la Real en estos cinco duelos, en los partidos saldados con éxito, los goles los han anotado los futbolistas recién incorporados, que ya están asentados y son importantes desde el arranque.
Los tantos de Brais, ambos gol partita, sirvieron para celebrar sendos triunfos por la mínima en Elche en Liga y ante el Manchester United en la Europa League, el de Kubo en el estreno en Cádiz trajo los tres puntos a Donostia y el de Sadiq nada más salir ante el Atlético de Madrid hizo que la Real sacara un valioso empate casero ante el Atlético de Madrid. El otro tanto de la campaña lo anotó Isak contra el Barcelona antes de ser traspasado al Newcastle. No sirvió de nada porque los culés ganaron 1-4.
Pero es que, además, su grado de participación es insólito para futbolistas que, como recién llegados, en teoría, necesitan un tiempo de adaptación. Brais ha disputado el 98,5% de los minutos oficiales hasta la fecha. Kubo ha sido titular en cuatro de los cinco partidos. Cho está siendo una de las sensaciones del equipo y reventó las costuras del Atlético de Madrid. Ha participado en todos los partidos, en dos de ellos como titular. Mientras que los recién llegados Sorloth y Sadiq se han repartido los minutos y las titularidades de estos dos últimos envites.
Más discreta y escasa está siendo la participación de los futbolistas del Sanse promocionados este curso. Turrientes y Sola fueron protagonistas en los compases finales de Manchester, Navarro sólo jugó 21 minutos contra el Barcelona, Karrikaburu no ha tenido ‘chance’ desde la llegada de Sadiq y Zubiaurre, de momento, reside a la sombra de Remiro.