Yeray superó hace ya algunos años un tumor testicular. El central del Athletic siempre está dispuesto a colaborar con la causa. Prefiero hacerlo, eso sí, desde el anonimato.
¿Qué siente cuando trascienden públicamente a nivel del fútbol mundial casos de tumores testiculares como el de Haller? ¿Le recuerda su caso?
Se han dado dos casos en Alemania y hace poco otro del chico de Las Palmas, al que también le mandé un mensaje y me respondió. Es el día a día. Millones de personas pasan por esa enfermedad. Obvio que me recuerda lo mío. Al final sale un futbolista, pero cuando me escriben otras personas para comentarme que han tenido esa enfermedad también me lo recuerda. No somos extraterrestres. También tenemos enfermedades, pasamos por momentos difíciles y aunque la gente no lo crea, somos personas totalmente normales.
¿Le piden muchas personas consejo o simplemente se limita a darles su testimonio?
Eso es algo que lo llevo más en privado, no me gusta que salgan las cosas. Con Haller el club me lo pide, se le da visibilidad y genial; pero a mí me gusta hacer las cosas en privado.