El cuarto partido de las Finales de la NBA (02:30h, Movistar + y League Pass) viene marcado por la necesidad de los Miami Heat. Los de Miami están casi obligados (por la historia) a ganar el partido de esta madrugada, ya que de no hacerlo, la serie se pondría con un casi definitivo 3-1 y volviendo además a casa de los Denver Nuggets. La victoria en el tercer partido fue clara e histórica, con Jokic y Murray como protagonistas de un hito que tardaremos en volver a ver.
Los Nuggets han logrado ya el objetivo en Florida, recuperar el factor pista, pero el mejor equipo de la temporada en la Conferencia Oeste no se conforma un triunfo. “Buena victoria para nosotros, pero no vinimos aquí para obtener una victoria”, dijo Michael Malone nada más ganar el tercer partido de las Finales.
El ambicioso -y un poco crecido, quizás- entrenador de los Nuggets vivió en primera fila el recital de sus dos estrellas en el tercer asalto de las Finales: Jokic firmó 32 puntos, 21 rebotes y 10 asistencias, mientras que Murray anotó 34 puntos con 10 rebotes y 10 asistencias. Lo del serbio es mucho más normal que lo del exterior, la gran incógnita del partido por una lesión en su mano.
A pesar de la mala pinta que tiene, nadie duda que Jamal estará disponible para el partido, algo que no puede decir Tyler Herro. El tirador de los Heat es la principal baja del equipo y no llegará a tiempo para el partido, unos problemas en la línea exterior que se suman a los que tuvieron en el juego interior.
“Perdimos muchas batallas físicas, balones divididos o en el aire a lo largo del partido y en momentos clave. Simplemente, nos pasaron por encima en la pintura. Anotaron como 60 puntos en la zona… Probablemente acertaron más del 65% en el aro”. Así de claro definió Spoelstra el partido de sus Heat, que vieron como los Nuggets anotaban 26 puntos más que ellos en la zona (60 a 34) y cogían 25 rebotes más (58 a 33).
Jimmy Butler y Bam Adebayo volvieron a ser los mejores para los de Florida (28 puntos para el primero, 22 puntos y 17 rebotes para el segundo) y ambos hablaron en la línea de su entrenador.
“Tendríamos que habernos tirado al suelo, ir a por balones divididos, obtener rebotes ofensivos, y tal vezhubiera sido un partido diferente”
Tras dos partidos de mucha igualdad, el tercer duelo fue claramente para los de Colorado. Y colorado se tuvo que poner Spoelstra al ver el acierto exterior de los Nuggets. A los de Denver no les hizo falta anotar de fuera para lograr la victoria, ya que solamente anotaron cinco triples, algo pocas veces visto en el baloncesto actual. Aún así, la clave de la derrota fue el pésimo ataque de los Heat, superado y condicionado en todo momento por la defensa de los Nuggets. “Hubo algunos momentos en los que nos superaron y nos atascaron las posesiones, redujeron nuestro tiempo de posesión y, a veces, lanzamos forzados en esas jugadas”. Todo listo para un partido en el que, siguiendo la temática ajedrecística que se ha establecido en estas Finales, los Nuggets tienen en jaque a los Heat.