Los Miami Heat ya habían advertido a los Celtics. En efecto, Boston ganó el partido del miércoles agotando al final con su inagotable potencial ofensivo a los Heat (134-121) pero necesitando de un apoteósico Jayson Tatum (49 puntos) para quitarse de encima al equipo de Erick Spoelstra. Pero el ‘0’, por agotamiento, por un día espeso de inspiración o simplemente por el buen hacer cerca de su aro de los de Florida sufrió un apagón (14 tantos con un 5/18 en tiros de campo y un 0/7 en triples) y Miami ganó en la prórroga (116-120) para disipar por una noche la euforia de los Celtics, sin discusión ahora mismo el mejor equipo de la NBA, líderes del Este con 18-5, tres de sus cinco derrotas en el tiempo extra y sólo superado por tres equipos. Los Heat se añaden a los Cavaliers (2 victorias) y los Bulls (también 2).
Boston tiene el mejor ataque de la historia de la liga –así lo dice el rating ofensivo, superior a 121-, y, literalmente, tiene el poder de anotar desde cualquier punto de la pista, cualquiera que sea el momento. La otra ‘J’, Jaylen Brown, sacó el genio y la manita a pasear a falta de 2,3 segundos con uno de esos triples inverosímiles, casi desde el logo, sin tiempo y muy forzado. En ausencia de Jayson, el escolta asumió más puntos y alcanzó los 37 (12/23 en tiros de campo), además de cazar 14 rebotes y repartir 5 asistencias.
Marcus Smart también asumió más carga anotadora (18 y 9 asistencias con un 8/14 en TC), y también acudió a la llamada de ‘auxilio’ de Tatum para compensar todos los puntos que no pudo poner él Grant Williams, con 18 y un 4/6 desde el perímetro. Pero en Miami, todo su quinteto titular en dobles dígitos, subieron aún más su sensacional rendimiento del miércoles Bam Adebayo (28 puntos y un 10/18 en lanzamientos) y Tyler Herro (26 y 10/19 en TC), sin que se deba pasar por alto que regresó Jimmy Butler y a un gran nivel (25 tantos y un 12/21 en TC), mientras que también se apuntaron a las dobles figuras Kyle Lowry (20) y Caleb Martin (10) para compensar la escasez de puntos del banquillo (11).
Tras un envite de rentas ajustadas igualado por la locura de Brown (110-110), el marcador no se movió mucho más en una prórroga en la que, para acabar de adobar una noche horrenda, Tatum, primero ahora en la carrera por el MVP, errara un triple a falta de 40 segundos que habría puesto por delante a los Celtics, una jugada seguida de un tiro en step-back decisivo de Butler (120-116) a falta de 9,4 segundos. Aunque sea raro, y más en el plan que están de meter más y más, los Celtics también pierden.