La actuación de los hermanos Williams no pasó desapercibida en Mestalla. Nico se encargó de firmar el empate cuando peor pintaban las cosas para el Athletic. Iñaki, que regresaba a la competición tras dos jornadas consecutivas de baja por lesión, asistió a Sancet en la jugada del 1-2.
El pequeño de los hermanos no lo tuvo nada sencillo en su emparejamiento con Gayà. El lateral zurdo del Valencia, capitán de su equipo, ha ganado en solidez defensiva con el discurrir de las temporadas y crea mucho peligro con sus incorporaciones por banda cuando su equipo se lanza al ataque. El duelo resultó muy intenso.
Nico Williams se sacó de la chistera un gol de bandera. El extremo diestro del Athletic se lanzó solo contra el mundo en una jugada que empezó por banda y acabó centrado con cuatro rivales rodeándole. Un toque con la puntera de su pie diestro le permitió culminar la acción ante la desesperada salidad de Mamardashvili.
Pase de lujo
Iñaki Williams también tuvo su parte de protagonismo en el 1-2 final. Su medido pase atrás a Sancet sirvió para que este rematara solo ante el marco local con todo a su favor. Una asistencia de lujo.