La aventura de playoff de los Memphis Grizzlies llegó a su fin anoche tras la derrota sufrida a manos de unos Utah Jazz superiores pero que jamás le perdieron el resto a su rival. Los de Salt Lake City, que ganaron por 110 a 126, cierran la serie con un 4-1 a favor pero con la sensación que el ciclo de los Grizzlies solo acaba de empezar.
Por desgracia para Memphis, sus opciones de mantenerse vivos se diluyeron muy pronto, pues un inicio arrollador de los de Quinn Snyder desbarató todos sus planes y puso el partido muy cuesta arriba desde el primer momento. Un parcial inicial de 27-47 les obligaba a remar para sobrevivir.
Taylor Jenkins se dio cuenta enseguida de qué cosas no funcionaban y procedió a cambiarlas pero ya era tarde. Kyle Anderson o Jonas Valanciunas acabarían la noche con diferenciales negativos estrepitosos y los Jazz pasando por encima de su rival.
Tan solo un último cuarto en el que Utah se dejó llevar permitió a los de Tennessee acercarse y maquillar un marcador que de otra forma hubiera sido muchísimo más abultado. La serie se cierra así con un solo triunfo de los Grizzlies, en el partido inaugural.
Ja Morant deberá esperar para ganar su primera serie de playoff. Anoche volvió a ser el mejor de los suyos, terminando con 27 puntos, 7 rebotes y 11 asistencias en otra noche increíble que sirve de vaticinio para todo lo que está por venir.
Dillon Brooks, como fiel escudero, también volvió a cumplir con creces y aportó otros 27 tantos que le colocan como uno de los jugadores con más futuro de este jovencísimo equipo de Memphis.
Enfrente, sin embargo, se encontraron a una franquicia ya hecha. Los Jazz no han sido los mejores de la temporada regular por casualidad y ayer volvieron a dar muestra de ello. Donovan Mitchell lideró a sus compañeros con 30 puntos y 10 asistencias, tirando con una efectividad sorprendente y sin titubear.
Tuvo la ayuda inestimable de Jordan Clarkson, haciendo gala de ese flamante trofeo al mejor sexto hombre del año con 24 puntos desde el banquillo, y un Rudy Gobert que ya espera otro galardón que le encumbre nuevamente como el mejor defensor de la liga. El francés, determinante en defensa, acabó además con 23 tantos y 15 rebotes, siete de ellos ofensivos.
Los Grizzlies dicen de esta manera adiós a una temporada en la que han superado todas las expectativas. Se clasificaron para playoff apeando a los Warriors de Curry en el play-in y han ofrecido una grandísima imagen en la post-temporada. Ahora, Utah espera rival en semifinales.
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