Los aficionados salieron encantados de San Mamés cerca de la una del mediodía, después de que los jugadores y el propio Valverde lanzaran un gran número de regalos a la grada al término de la sesión de trabajo. “Es la mejor forma de animar todo el cotarro. Ha sido muy acertada esta iniciativa y los jugadores ne han parecido bastante cercanos, creo que ellos también han disfrutado”, dijo a MD Gerardo Renedo ya en los exteriores del campo.
En la misma línea se mostró Borja Tellado: “Ha estado entretenido, interesante. Me ha parecido muy buena la iniciativa. Ha habido mucha gente, pero ha estado bastante bien organizado. Se ha hecho muy cómodo”.
Ainhoa Aranzabal y las hermanas Eider y Elene Kortabarria llegaron desde Mondragon. Tienen la familia ‘dividida’: dos son del Athletic y otros dos de la Real. “Tenemos el derbi en casa”, señaló entre risas Ainhoa. “Ha estado muy bien sobre todo por ver las caras de las crías. Nos ha parecido muy bien la iniciativa. Los jugadores estaban a lo que estaban, para ellos es su modo de ganarse el sueldo. Tampoco se les puede pedir mucho más. Ha habido una gran cantidad de regalos”, destacó.
Por su parte, tres jóvenes aficionados, Alain Alonso, Igor Ortiz y Dani Salas, también disfrutaron. “Ha estado divertido. Ha sido una iniciativa diferente. Creo que los jugadores han tratado de dar espectáculo con algún remate muy bueno”, decían estos tres athleticzales, que no habían sido agraciados con ninguno de los regalos: “Ha habido mucha gente”. Se llevaron, eso sí, el buen sabor de boca de ver a sus ídolos en directo en un marco incomparable como San Mamés.