El 23 de James podría ser el 23 de Floyd en los partidos de Los Angeles Lakers dentro de los playoffs de la burbuja NBA en el complejo Disney de Orlando, Florida. Esa es, al menos, la intención con la que trabajan tanto la liga como la asociación de jugadores NBPA. La medida de cambiar los nombres de los jugadores con mensajes de lucha y reivindicación social sería una más entre las que los actores de la competición preven para la reanudación de la temporada.
Esta previsión en el plan de retorno de la liga fue compartida por el presidente de la NBPA Chris Paul a The Undefeated el sábado y la idea sería que en los reversos de las camisetas, encima de los dorsales, pudieran leerse nombres como los de George Floyd, Breonna Taylor o mensajes como Black Lives Matter o I can’t Breathe. Según esta previsión, los mensajes podría defender una causa social, pedir justicia o apoyar a una organización benéfica.
“Tan solo intentamos seguir arrojando luz a los distintos problemas de justicia social sobre los que los chicos de nuestra liga continúan hablando día sí, día también”, explicó Paul al medio estadounidense. “La gente dice que la justicia social estará lejos de la cabeza de todos en Orlando. Con estas camisetas, esto no pasará”.
Un voluminoso número de jugadores que participarán en el retorno a la competición ya han dado el sí a los distintos escenarios que la liga prevé para aportar su granito de arena para favorecer el movimiento y la discusión sobre la justicia social en el país. Según CP3, la NBPA planea contactar con las familias de Floyd, Taylor, Ahmaud Arbery, Trayvon Martin y otros afectados por la violencia policial para recibir el visto bueno a la hora de utilizar sus nombres.
El objetivo es potente y la ejecución sencilla: alimentar el debate a través de las espaldas de las camisetas de los mejores jugadores de baloncesto del mundo.
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