Los sigue habiendo que, hasta con sorna, siguen recordando a los Sacramento Kings que se deshicieron de Tyrese Haliburton ante el nivel superlativo que está exhibiendo el base de los Indiana Pacers. Sin embargo, todo cobra más sentido para unos Kings que apuntan a inesperado ‘hit’ de la temporada, quintos en el Oeste con 12-9, con mejor récord que otros de los que tanto se habla, sin ir más lejos un campeón, los Golden State Warriors, a los que, por cierto, la franquicia de California ha ganado esta temporada (122-115). Que vayan diciendo mientras ellos van tumbando contendientes al anillo y hasta metiéndoles palizas como la de anoche a Los Ángeles Clippers (123-96) y en su casa.
Sacramento está construyendo algo muy bonito para demoler la ‘maldición’, la ausencia más larga en play-offs de la historia con 16 temporadas seguidas sin clasificarse. Y en ello está participando de una manera muy importante Jordi Fernández, entrenador asistente el de Badalona de Mike Brown, el técnico principal de estos Kings. Domantas Sabonis, el principal jugador por el que la franquicia decidió utilizar a Haliburton como moneda de cambio el año pasado, anotó 24 puntos con un casi perfecto 10/11. El pívot es esencial en unos Kings que equilibraron la plantilla subiendo el nivel en la pintura con su incorporación al tiempo que se decidían por De’Aaron Fox (14 tantos) en la difícil elección como base de presente y futuro entre él y Haliburton. En el fondo, todos, los propios jugadores y las dos franquicias, han salido ganando. Un ‘win-win’ en toda regla.
Y todo funciona todavía mejor cuando un ‘rookie’ como Keegan Murray, número 4 del draft, rinde ya a nivel ya de manera inmediata, 23 tantos contra los Clippers y otro joven como Kevin Huerter sigue creciendo mientras el ex ‘laker’ Malik Monk suma desde el banquillo (13 puntos con un 3/5 en triples). Así, todavía más difícil para que el ex del Baxi Manresa Chima Moneke, tercero en valoración de la ACB el año pasado con 21, se haga un hueco, sólo dos partidos jugados en lo que va de temporada.
Y mientras, los Clippers deben decidirse hacia dónde van. Las ausencias por lesión de Kawhi Leonard y Paul George -siempre la misma canción-, les disculpa en parte pero partidos como el de esta pasada madrugada evidencian una falta alarmante de soluciones, sin tiro -35% en lanzamientos y 27% en triples-, sin circulación de balón -15 asistencias por las 31 de los Kings-, y sin casi nada. Ninguno de los titulares alcanzó los 15 puntos y nadie llegó a los 20, siendo Brandon Boston Jr. el único que se acercó ante estos Kings que a la chita callando ya son quintos. Que se anden con cuidado los demás.