Los Brooklyn Nets demostraron anoche que incluso en su peor forma son capaces de solventar partidos. Ayer se llevaron un triunfo sencillo ante Chicago Bulls, por 105 a 91, pese a que su trío estelar estuvo lejos de su mejor nivel.
Kevin Durant erró 13 de sus 17 lanzamientos, James Harden apenas tiró cuatro veces a canasta y Kyrie Irving dio la cara para irse hasta unos aceptables 22 puntos. Ese fue el resumen de un big-three llamado a hacer grandes cosas. Y bastó.
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En los Bulls, sin Zach LaVine que sigue lesionado. Fue la noche del novato Pattrick Williams que aprovechó la ocasión para mostrar sus mejores cartas y sumar 24 puntos con grandes porcentajes de tiro. No pudo decir lo mismo su compañero Nikola Vucevic, que apenas anotó 4 de sus 18 lanzamientos.
El encuentro no tuvo demasiada historia después de que los Nets se marchasen en el marcador antes del descanso. Los intentos de Chicago de recuperarse tras pasar por vestuarios fueron inútiles y Brooklyn se llevó un triunfo por inercia pese al pobre juego.
Chicago, ya eliminado de la carrera por el playoff, tendrá este domingo su último encuentro de la temporada mientras que los Nets buscarán el triunfo para poder empatar con los Sixers en lo más alto de la Conferencia Este.
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