Enfado. Rabia. Incomprensión. Miedo. Son algunos de los sentimientos mostrados por los pilotos de F1 por lo que vivieron en el GP de Japón de F1 del pasado domingo, algo que “no debería volver a pasar nunca más”. Los integrantes de la parrilla se mostraron contrariados por la salida a pista de la grúa que debía remolcar el monoplaza accidentado de Carlos Sainz con los coches aún en pista en el GP de Japón, con poquísima visibilidad, una intensa lluvia y mucha agua en pista, en condiciones en las que cualquier vehículo, por lento que fuera, podía haberse ido contra dicha maquinaria. Es algo que ya ocurrió en el mismo trazado de Suzuka en 2014 y que le costó la vida a Jules Bianchi. 8 años después, pudo ocurrir otro desastre, y por ello, los pilotos tienen claro que alzarán su voz en el próximo briefing de pilotos para que Dirección de Carrera no vuelva a caer en el mismo error.
La FIA ya ha iniciado una investigación de lo ocurrido, y por el momento, el motivo por el que la grúa entró en el asfalto con coches rodando aún en él en lugar de esperarse a que los monoplazas se pararan en el pit lane por bandera roja. Por ahora, solo se sabe que la grúa entró con los coches tras el ‘Safety Car’. Todos menos Pierre Gasly, que al parar en ese instante a boxes para cambiar gomas, rodaba en solitario para reengancharse en la cola tras el ‘Safety’. En ese intento, Gasly pasó demasiado rápido por delante de la grúa, a unos 200 km/h. Escalofriante es ver que en ese instante había dos operarios en el asfalto, enganchando el coche a la grúa. Uno de ellos fue captado por la cámara del coche de Sainz, apartándose de un salto cuando pasó Pierre. Ambos pudieron verse envueltos en un grave accidente si uno de los monoplazas perdía el control, algo que podía ocurrir perfectamente por la cantidad de agua que había en el asfalto.
Gasly debió pilotar más lento porque sabía que en ese lugar se había accidentado un coche, ya que pasó por allí en la vuelta anterior. Se llevó un susto tremendo y dejó claro que “podía haber muerto”. Iba rápido, pero la grúa jamás debió estar ahí.
De las imágenes on board de Gasly, queda claro que debido a la nula visibilidad, la grúa no se veía hasta que su coche estaba ya muy cerca. De ahí el tremendo susto que se llevó el francés. Pero incluso Max Verstappen, tras el coche de seguridad, no podía creer lo que estaba viendo. Al darse cuenta de que había una grúa en pista, pese a ir a baja velocidad, decidió mover el volante hacia su derecha pisando la hierba para evitar cualquier problema. Leclerc, alucinaba en ese momento: “¿Qué cojones hace una grúa ahí?”, decía el monegasco, recordando inevitablemente la muerte de su mejor amigo, Jules Bianchi, en esa misma pista por ese mismo motivo.
Las declaraciones posteriores de los pilotos fueron contundentes. Primero, en pleno periodo de bandera roja, fueron ‘Checo’ Pérez y Lando Norris los que se quejaron. “Qué cojones. ¿¡Cómo sucedió esto!? Perdimos una vida en esta situación hace años. Arriesgamos nuestras vidas, especialmente en condiciones así. Queremos correr. Pero esto… es inaceptable”, dijo el inglés de McLaren.
“¿Cómo podemos dejar claro que nunca queremos ver una grúa en la pista? Perdimos a Jules por ese error. ¡¡¡Lo que pasó hoy es totalmente inaceptable!!! ¡Espero que esta sea la última vez que vea una grúa en la pista!”, apuntó Pérez.
“Si los pilotos no ven nada, estás diciéndole a la suerte que haga lo que se le ocurra a hacer en un día como hoy porque los 18 pilotos que venían detrás de mí por lo visto ni si quiera me han visto parado en medio de la pista y ha sido pura suerte que no me hayan dado. Así que imagínate… está la cosa un poco al límite y espero que tomen la decisión correcta”, comentó Carlos Sainz en ‘DAZN’.
“Pasé a dos metros de esa grúa y si hubiera querido ir dos metros a la izquierda, ahora estaría muerto”, comentó Pierre Gasly a ‘Sky’, asegurando que había sentido “miedo” y mostrándose muy enfadado por “no respetar” el recuerdo de Jules Bianchi.
Y Alonso, tras la carrera destacaba que era algo que los pilotos tenían que hablar con la FIA, algo que ocurrirá en Austin. “La verdad es que tenemos que hablarlo con la FIA. Después de 2014, del accidente de Jules (Bianchi), cambió un poco todo el sistema para evitar que eso no pasase nunca más. Y que hoy hayamos visto una grúa en la pista… da igual que haya Safety Car, bandera amarilla o roja. La grúa en la pista tiene que salir solo cuando los coches estén en el pit lane o la carrera neutralizada. Así que intentaremos ayudar a la FIA y ver cómo sucedió y quién dio la orden para entender, ahora es difícil de opinar”, expresó el asturiano.
Lo cierto es que los sustitutos del polémico Michael Masi, Eduardo Freitas y Niels Wittich, pese a su experiencia en otras series, han sido centro de muchas críticas por su lentitud en la toma de decisiones en muchos accidentes este año. El caso claro fue el del GP de Monza, donde tardaron demasiado en anunciar el periodo de ‘Safety Car’, lo que finalmente impidió que hubiera tiempo suficiente para que la carrera acabase como es debido.